Se dice que cuando Dios cierra una puerta abre una ventana… Los bancos son expertos en buscar soluciones: abrir esas ventanas cuando se les cierran algunas puertas para ganar dinero.
Mientras el Euríb0r estaba alto no importaba dar diferenciales bajos, cuentas sin comisiones, depósitos con jugosos intereses… Los bancos ganaban pasta porque cobraban pasta de las hipotecas. Los sueldos eran más altos, la economía más estable y próspera y prestar dinero era rentable.
Esto dejó de pasar y al prever que el Euríbor bajaría, la banca se sacó de la manga la cláusula suelo, para cobrar sí o sí una cantidad mínima de intereses (del 2,5% en adelante según la hipoteca), aunque el Euríbor sufriera más caídas que un bebé que se echa a andar.
Cuando la gente, promotoras, constructoras y empresas dejaron a deber cuotas y cuotas, los bancos pararon de dar hipotecas. Cuando el Banco de España les pidió tener fondos para evitar más quiebras y una nueva reestructuración bancaria por falta de pasta, cerraron aún más el grifo. Y ahora que han tenido que quitar el suelo muchos de ellos, están ansiosos por recuperar esas ganacias por otra parte.
Al ver que se quedaban en dique seco y con menos clientes, han reabierto el grifo con condiciones estrictas. Pero como están necesitados de fidelizar clientes, pues no paran de bajar los diferenciales de las hipotecas. Eso sí, como la Asociación Hipotecaria Española (patronal del sector) y ciertos bancos están asustados porque piensan que la guerra de diferenciales puede mermar sus beneficios, el grueso de la banca se ha liado a poner comisiones.
Es un viejo truco para linchar a todos poco a poco y al final conseguir mucho dinero. Las comisiones han reaparecido por todas partes: en las cuentas -aunque sean para domiciliar la nómina, que tradicionalmente eran gratuitas-, en las tarjetas y, cómo no, en las hipotecas.
Los préstamos con los diferenciales más bajos, esos de Euríbor + 1% que parecen tan atractivos, están forrados de comisiones. Por abrir la hipoteca entre un 0,5% y un 1% según el banco, lo que en una hipoteca de 100.000 € suponen entre 500 € y 1.000 € nada más estrenar la relación con la entidad.
Comisiones también por llevarse la hipoteca a otro banco (subrogación) o por cambiar las condiciones más adelante mediante un nuevo contrato (novación). Comisiones por amortizar anticipadamente o cancelar la hipoteca antes del plazo previsto. Comisiones por tener una cuenta, aunque sea la de la hipoteca, por sacar dinero en cajeros que antes eran afines, por no aportar a un plan de pensiones y por no atarte al banco exageradamente a base de contratar seguros y otros productos.
Comisiones hasta por respirar… Es el precio que nos cobran por quitar el suelo, bajar los diferenciales y repartir algo de crédito entre los clientes que consideran buenos pagadores. Al resto que les den morcilla y más comisiones.
Denunciar,Denunciar…. Hasta que pierdan a estos clientes que no son rentables y que vivan de los ricos que si a estos les devuelven el dinero de las comisiones.y entonces empezaran a cerrar oficinas y no invertirán ni en Europa ni en Sudamérica pues ya los han exprimido