Parece que la larga desaparición del IRPH dejará de ser eterna. Una desaparición que se remonta a abril de 2012 y que todo apunta a que se llevará a cabo definitivamente el próximo 1 de noviembre -muy apropiado darle matarile el día de los difuntos-, porque el Gobierno ya tiene un plan para sustituirlo.
Los que tengan puesto en el contrato de la hipoteca que si su IRPH desaparece tienen que empezar a usar otro índice de los que no desaparecen, por ejemplo el IRPH Entidades -que es el único IRPH que se salva de la quema-, pues les toca usar ése.
Si, en cambio, pone que el índice que sustituye al suyo es uno de los que sí desaparecen, pues les toca usar otra cosita. ¿Y qué cosita es? Empieza por la T (de timo), qué será… Qué será… Qué seráaaaaa…
Les corresponde pagar de intereses una media de lo que cobran los bancos p0r las hipotecas a más de tres años, o sea algo muy parecido al IRPH Entidades.
A esto habrá que sumarle un diferencial, que saldrá de calcular más o menos cuánto ha pagado cada uno por su hipoteca durante todos los años que ha estado vigente antes de que desapareciera su IRPH.
El resultado de todo esto, como no podía ser de otra manera, es que los afectados por la desaparición del IRPH Cajas, el IRPH Bancos y el IRPH CECA han cogido un cabreo sordo porque, contra lo que va pregonando por ahí el ministro de Economía, Luis caído de un Guindo, creen que les va a subir la hipoteca entre 200 y 400 pavos al año.
Con mucha envidia miran de reojo las cifras que está marcando el Euríbor, que cerró agosto en el 0,542%. De cachondeo comparado con el 3,438% al que cerró en julio el IRPH Entidades. Si pudieran, como quieren y piden, ligar su préstamo al Euríbor +1%, la hipoteca les bajaría 2.300 pavos al año.
No les gusta ningún IRPH. ¿Y a quién sí, que no sea la banca? Por eso quieren que desaparezca también el IRPH Entidades, al que acusan de ser injusto y de estar hecho a dedo con las cifras que a los bancos les conviene dar. Bueno, esto también es así en el Euríbor pero mientras esté bajo y nos ahorremos pasta con la hipoteca no se están quejando más que cuatro gatos más papistas que el Papa.
Comprendo que no quieran pagar más, pero que no sueñen mucho porque el Gobierno no quiere que paguen menos para no perjudicar a la banca. Ellos saben lo que firmaron y han estado pagando esos intereses guapamente y sin protestar. El Euríbor subirá y romperá muchas economías de nuevo, aunque sálvase quien pueda y mientras pueda…