Bankinter acaba de lanzar una hipoteca a interés fijo del 2,05%. Toda una oferta rompedora teniendo en cuenta la trayectoria de este tipo de préstamos en España, habitualmente por encima del 5% de interés, y la oferta actual, del 2,5% en adelante.
Como es habitual en las hipotecas a interés fijo el plazo de amortización de Bankinter (10 años) es menor que en las de interés variable (30 años).
Para mantener el interés del 2,05% exige la contratación de seguros de hogar y vida y domiciliación de nómina y tres recibos. No es mucho si se tiene en cuenta lo que suelen pedir otros bancos. De no hacerlo, el interés sube, igual que ocurre si se amplía el plazo. A 15 años el interés es 2,40% y a 20 años es 2,75%.
La hipoteca financia hasta el 80% del valor del piso si se va a usar como vivienda habitual y hasta el 55% como segunda residencia. A diferencia de lo que hace en su hipoteca a interés variable, ésta sí tiene comisiones: 1% por abrir el préstamo, 0,5% por cancelar, amortizar o subrogar (cambiarlo de banco) durante los 5 primeros años, y del 0,25% en los mismos casos a partir del quinto año.
Bankinter se ha tomado en serio la competición por captar clientes solventes. Fue el primero en romper el hielo en octubre de 2013, bajando el diferencial de su hipoteca (Euríbor + 1,95%) por debajo de la barrera mental del 2%.
Además de ser pionero en abrir el grifo del crédito cuando todo el mundo lo tenía muy cerrado o con unas condiciones imposibles, ha ido rebajando su diferencial hasta Euríbor + 1,50%, que si bien ahora se queda un poco alto para las ofertas más competitivas que ya vamos viendo a Euríbor 1,30%, es la única entidad que ofrece su hipoteca con dación en pago. O sea que si al final dejas de pagar, entregas las llaves al banco y listo, no hay subasta de tu casa por un precio irrisorio ni arrastras deuda pendiente.
Seguro que su próximo paso es bajar este diferencial. Pero por el momento ha atacado el mercado del interés fijo, que tras años más parado que un gato de escayola y con intereses por las nubes, se ha reactivado con la bajada del Euríbor y la competición por cazar buenos pagadores. Quieren compensar que con el Euríbor por los suelos se pagan cuotas bajas en las hipotecas a interés variable y que ha caído el número de préstamos porque se conceden menos y los viejos se van terminando de pagar sin prisa pero sin pausa.