Falta poco para que se apruebe la nueva ley hipotecaria y un poco más para que entre en vigor.
Todo depende de si el Gobierno de Pedro Sánchez es capaz de sumar apoyos en el Parlamento para aprobarla y si, una vez que llegue al Senado, la mayoría que tiene el Partido Popular no le cambia un montón de cosas, entre otras que en vez de entrar en vigor 30 días después de que se publique en el Boletín Oficial del Estado (BOE), se empiece a aplicar a los 90 días (¡¡casi 3 meses!!).
Lo que pase al final con la Ley Hipotecaria está por ver… Es seguro que se aprobará o Bruselas nos mete una multa multimillonaria aún más grande que la que nos quiere meter ya por llevar 2 años de retraso en cambiar las reglas del juego hipotecario según lo exigido desde Europa.
Y como se aprobará y habrá cambios, pero los bancos se están adelantando a ello, por un lado es bueno esperarte a la nueva ley pero por otro no. A favor de esperar está que más vale firmar el préstamo bajo un nuevo sistema que se presenta más favorable para los clientes, cambiando las condiciones de la vinculación y las comisiones y, entre otras muchas cosas, haciendo que la banca asuma todos los gastos de la hipoteca excepto la tasación, y no sólo el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (IAJD) que ya paga desde el Real Decreto que entró en vigor el pasado 10 de noviembre.
A favor de firmar ya es que probablemente las hipotecas sean más caras en unos meses, según la tendencia que ya se ve de que algunos bancos han endurecido sus condiciones, sobre todo aumentando la vinculación y subiendo el diferencial, pagando a cambio todos los gastos de la firma, incluida la tasación (en algunos entidades). Por ejemplo: ING, Openbank, BBVA, Unicaja, Caixabank, MyInvestor y Pibank.
Es la nueva tendencia, por eso si firmas ahora te interesa un banco que corra con los gastos pero no haya subido los precios como Pibank o MyInvestor o que sea barato pero asuma parte de los gastos o ninguno (ya habrá una sentencia para que nos lo devuelvan) como Coinc.
En muchos casos no compensa que el banco pague todos los gastos a cambio de tragarte un diferencial más alto, estar más atado o tener más comisiones. Que no te ciegue el subidón del momento: al final sale más caro. Esos 15.000 – 20.000 euros que de media te pueden costar los gastos de la hipoteca te los cobra el banco a lo largo de los próximos 30 años en comisiones y sobre todo con una subida del tipo fijo el primer año y del diferencial.
En breve todos asumirán los gastos, así que ya no los podremos comparar por eso sino porque el que además no te cobre la tasación y, sobre todo, quien tenga mejor diferencial, menor vinculación y cero comisiones.