En un entorno laboral del cual no quiero acordarme, tiempo ha que un hidalgo argentino (si no preciso reviento) me espetó en una discusión entre compañeros: “mira, yo antes dejaría a mi mujer que al trabajo”.
No voy a cuestionar su respuesta (cada uno tiene sus prioridades, oiga) pero sí voy a aprovechar que San Ballantine’s nos acecha para comentar un estudio de la consultora Ernst & Young, que acusa a los españoles de ser los europeos más fieles a los bancos pero también de querer ser los más infieles. Aquí como siempre, o los primeros de la lista o los últimos de la cola. ¡Ni calvo ni con dos pelucas! ¡El gris existe!
¿Y por qué no serlo? ¿No se aprovechan ellos de que algunos ciudadanos están más verdes en conocimientos financieros que los brotes de ZP que siguen sin verse? En este país, en el que todo el mundo cambia de todo menos de peluquero, el 75% de los españoles dice que está satisfecho con su entidad principal pero el 20% opina que la dejaría por la primera que pase y le diga cuatro monerías.
Me sorprenden dos cosas. La primera es que estas cifras están muy por encima de la media europea y la segunda: que se nos va la fuerza por la boca porque la realidad es que no cambiamos tanto de banco como de intención de voto, opinión o camisa.
Siguiendo nuestra tradición católica de país laico, al banco le somos infieles de pensamiento, palabra, obra y omisión. ¿Omisión? ¿Se puede ser infiel por omisión? Hombre, si metes los cuartos en el calcetín o debajo del colchón… Va a ser que también.
Es más, haciendo honor a ese pozo de sabiduría que es el refranero español, por el interés le queremos, Andrés. Y es que sobre todo el 36% dice que le pondría los cuernos por otro que le dé más interés.
Por qué no nos movemos tan fácilmente se podría explicar por la arraigada cultura española de poseer el chamizo en lugar de alquilarlo, lo que nos aboca al préstamo hipotecario, que a su vez nos lleva a la esclavitud más absoluta frente al banco, eso sí disfrazada como el dulce amor de una geisha.
Para asegurarse de que no moneamos por ahí cual abejorro en época de floración, los bancos no te colocan un anillo sino un cinturón de castidad, no en el dedo sino al cuello como soga, no de brillantes sino de plomo, pero sí de compromiso, que también dice “para toda la vida” y que, en lugar de en la salud y en la enfermedad, te dice “en la nómina, en los recibos, en las operaciones online, en el saldo mínimo de la cuenta, en nuestros fondos, en el plan de pensiones, en el seguro del hogar y en el seguro de vida”.
Claro, ¿así cómo no vamos a ser los europeos que más productos contratamos de media con el banco (cuatro) y que más tiempo permenecemos con una entidad (10 años)?
Esto sí que es amor y compromiso y nosotros sin saberlo. Esto sí que es una relación estable y nosotros pensando en ser infieles con la entidad de al lado. ¡Con los bancos sí que te casas para toda la vida! Porque con los precios de la vivienda, aunque hayan bajado un 12% en España, toda una vida es lo que tardas en pagarla.
¿Qué pensáis? Yo en la libertad del abejorro que va de flor en flor mientras chupa del bote. ¡Qué envidia!
A los bancos hay que dejarles cuando nos parezca por lo que más nos convenga. Ellos lo hacen. De hecho prefieren financiar a empresas y partidos políticos de los que obtendrán un beneficio mayor, muchas veces incuantificable, del que obtienen de nosotros. A los partidos les han perdonado 50 millones y a nosotros negándonos hipotecas. ¡No hay derecho!
Pues si la verdad es que yo también creo que hay que dejarles cuando más con convenga porque el dinero cuesta mucho ganarlo como para regalarselo a los bancos ( que ya tienen bastante ). Desgraciadamente muchos caen en el anzuelo de domiciliar la nomina y aceptar unos “regalos” con unas condiciones realmente desproporcionadas. Hace unos meses pensé en domiciliarla en un banco que regalaban una TV de plasma o una consola de última generación pero al leer la letra pequeña se me quitaron totalmente las ganas…
Resumiento muy brevemente tenias que contratar 2 tarjetas de credito con sus respectivos mantenimientos, tener 3 recibos domiciliados y tener la nomina durante 2 años minimo, además había que gastar más de 100 euros de gastos de envio de tu regalo y creo que alguna que otra clausula… con lo cual era atarte con el banco durante 2 años por un regalo de 400 euros del cual tenias que pagar 100 por enviartelo y además todos los mantenimientos de las tarjetas y demás….
Jaja muy bueno el artículo yo ahora mismo estoy haciendo gestiones para cambiarme de Banco, me ahorro un 0,3% de diferencial, pero no veas lo que tardan en gestionar el cambio de Banco, todo son pegas (sobre todo del Banco donde tengo la hipoteca actualmente)… pero va a merecer la pena el esfuerzo, a luchar, hasta el final !!!
Ánimo, Paganini, seguro que consigues algo mejor. No hay nada como proponerse las cosas y luchar por ellas. ¡Suerte! Hay vida más allá de la hipoteca y hay oferta más allá de nuestro banco.
Se ha cortado el comentario anterior. Queria decir a todo el mundo que no seais perezosos y os cambies de banco para conseguir otras condiciones mas ventajosas. A largo plazo veréis el ahorro en las cuotas de vuestras hipotecas. No quiero hacer publicidad, pero el cambio se puede hacer o calcular comodamente por internet (yo lo hice clickeando uno de los anuncios de esta web)
La pereza es la madre de todos los vicios y en este caso lo pueden ser de un pequeño sangrado económico de la maltrecha economía familiar. Siempre nos preguntamos a fin de mes por dónde se nos va el dinero: pues bien, muchas veces se nos va en comisiones bancarias y pequeños gastos que sumados dan una cifra interesante. Cambiarse merece la pena, siempre que se cambie a mejor, claro.
Muy buen artículo, así estar informado de economía e hipotecas es más divertido, gracias. Yo estoy intentando librarme del cinturón de castidad (jaja, qué buena la comparación) que me puso Caja Madrid el año pasado. Resulta que como contraté una hipoteca joven, el seguro de vida sólo es obligatorio el primer año, con lo que si mi pareja y yo lo cancelamos ahora dejaremos de pagar unos 350 euros.
También he llamado a Mapfre para reajustar el seguro de la casa. ¡¡¡Será posible que me pusieron 3000 euros en joyas y no tengo ni una ni la voy a tener…!!! Con este reajuste del seguro y la eliminación de los de vida ahorro 400 euros que dejo de pagar a principios de marzo.
A veces no hace falta cambiar de banco, solamente de condiciones. Ya se sabe: el que no llora no mama. El banco no te va a llamar para decirte qué tienes asegurado de más o de menos (eso se supone que es preocupación y conocimiento de cada uno) y tampoco te va a llamar para decirte que el seguro de vida es prescindinble. Por eso has hecho muy bien en moverte, cada uno tiene que mirar por sus intereses jugando con todas las ventajas dentro del sistema. ¡Enhorabuena por ese ahorro!
Yo estoy pensando en cambiar de banco porque tengo una cuenta joven que sólo dura hasta que cumples 29 años, lo que se producirá en abril. Hasta ahora era gratis pero a partir de que cumpla 29 me cobrarán por el mantenimiento, ¡cómo si no tuvieran bastante con lo que sacan moviendo por ahí mi dinero!
Yo también estoy buscando banco por lo mismo. Estoy pensando en que, como tengo la nómina libre porque la domicilió mi pareja cuando contratamos la hipoteca, voy a hacerme una cuenta nómina a ver si además de un TV de plasma o algo así no me cobran por tener tarjeta, la cuenta, las transferencias, etc. ¿Conocéis alguna entidad que ofrezca algo interesante ahora mismo? Gracias.
Hola Consumo cuidado, yo creo que Banesto siempre tiene cosas muy interesantes, a mi me “regalaron” la Wii hace poco y tamén “regalan” Ordenadores Portatiles, Televisiones etc, pero ellos se aseguran que permanezcas un número determinado de meses la nomina… Espero haberte servido de ayuda
Sí, muchas gracias. Es una de las entidades que tenía en mente. No me importa permanecer unos meses con ellos si me dan algo interesante y luego puedo marcharme a otro sitio que me interese más.
Si alguien sabe algo más que, por favor, me lo diga. Saludos.
Ten cuidado con lo que te regalan, fijate muy bien en la letra pequeña porque no es solo que tengas que estar unos determinados meses es que te obligan a contratar una serie de servicios ( sus tarjetas de credito ) y pagar los respectivos mantenimientos y no solo eso sino que el regalo que te dan tienes que pagar tu los gastos de envio y son exagerados.
Hay que leerse muy bien la letra pequeña en todo lo que contratamos en esta vida, pero si tiene que ver con los bancos aún más….
Si esto que cuentas no es un abuso……. que se abra el cielo y que baje quien tenga que bajar.
En mi caso tambien quisieron clavarme el gasto de mantenimiento ese de marras al cumplir los 29 y gracias a que a mi mujer la llevo 7 años lo que hicimos fue ponerla a ella como titular y a mi como autorizado,de esta manera durante 7 años nos ahorramos ese impuesto que el banco queria cargarnos,prefiero quemar ese dinero que regalarselo,por poca cantidad que sea.
Claro que sí, es que ese dinero es tuyo y no tienes por qué dárselo a nadie, ¡pero qué abuso! Un buen truco lo de poner a tu mujer como titular.
Es increible el tema de comisiones, cuando tienes poco dinero te cobran por todo, pero eso sí, si te toca la lotería o te va bien y tienes bastante dinero… todo son facilidades, peloteos y casualmente todas las comisiones de tarjetas y demás que antes te decian que no pueden bajo ningun momento bajarlas ni quitarlas… de repente todo desaparece y eres otra persona para ellos….
Es verdad, todo el mundo tiene un montón de productos contratados con su banco principal pero es que si tienes en cuenta que para darte la hipoteca te piden hasta que empeñes a tu suegra, ¿cómo no vamos a tener contratado todo con ellos? Lo raro es que nos quede algo que contratar con la competencia…
Si se trata de ser infiel al banco yo me apunto pero como apuntan por ahí hay que leer con mucho cuidado antes de firmar nada porque, por menos de nada, nos podemos atar más o peor que al otro banco.
Es que los bancos te atan de una manera impresionante sin que te dés cuenta y cuando te quieres marchar son penalizaciones por todas partes.
Estoy contigo en que hay que tener mucho cuidado con lo que se firma. También estoy de acuerdo en que hay que cambiar de entidad si crees que hay algo mejor, por eso estamos en un mercado libre, pero hay que andarse con cien ojos.