Se cumple un año desde que los bancos despertaron de su letargo prestamista y les dio nuevamente por dar vidilla al mercado inmobiliario abriendo el grifo del crédito.
Desde el año pasado, la media de los diferenciales ha bajado del 3,2% al 2,1%. Es mucho, la cifra más baja de los cuatro últimos años, pero a la vista está que todavía sirve de poco. O eres súper-híper-mega solvente y te toca la lotería, o nada.
La estadística dice que en junio se dieron un 20% más hipotecas. Después de casi 4 años bajando sin parar esto ha sido un notición. ¿Pero de verdad se dan hipotecas? ¿Es cierto que se ha abierto el grifo del crédito? ¿Cómo son las hipotecas que realmente dan los bancos?
Nada mejor que preguntar a los que están en plena búsqueda de dinero para comprar un piso. Conozco varias personas en esa situación y os contaré lo que están viviendo, que demuestra que no es buena hipoteca toda la que lo parece, ni los bancos han abierto tanto la mano como deberían.
Dos gemelas de 30 años: una es fija hace tiempo y gana 2.800 € al mes. La otra gana 1.800 €, pero sólo tiene empleo estable desde hace 4 meses. Aportan el 20% de lo que vale el piso y no tienen otras deudas ni historial moroso por ninguna parte.
El banco les dice que su hipoteca es a Euríbor + 1,89%. Con ese sueldo van sobradas para pagar… Incluso el de la que más gana sería suficiente. Les dan la hipoteca pero… Como una de ellas no tiene apenas antigüedad en el trabajo el banco se descuelga con que para ellas es Euríbor + 2,50%. ¿Quéeeeeeeee? ¡¡Menudo robo!!
Así, la que inicialmente parecía una hipoteca súper maja y con baja vinculación -para lo que se ve por ahí todavía- rápidamente se convierte en un producto caro que no les compensa.
Otro caso: pareja joven. Ella, 33. Él, 35. Una hija. Hace cinco años y medio pidieron 137.000 € para un piso de 193.000 €. Desde entonces han pagado religiosamente, amortizando a troche y moche: ya sólo les quedan por pagar 57.000 €. Ambos tienen trabajo fijo: ella desde 2011 y él desde 2008. Entre los dos ingresan 2.500 €.
Necesitan una hipoteca puente para saltar a otro piso y lo único que encuentran son carisisisisímas ¿ofertas? que les harán perder el Euríbor + 0,37% que tienen actualmente. Encima algunas entidades ni les contestan. No sé si es peor que te digan que no o que te dejen esperando sin saber nada…
Básicamente es también lo que le pasa a un soltero de 34 años que tiene trabajo fijo desde 2009 y que no encuentra banco que quiera casarse con él. Gana 1.500 € al mes y tiene 20.000 € ahorrados. Quiere un piso de 100.000 €, ni muy grande, ni muy céntrico, ni tan siquiera nuevo.
De sobra sabemos que los mileuristas lo tienen crudo en estos tiempos, pero este chico gana más dinero y no encuentra tampoco quien le deje 80.000 € sin darle sablazos hasta en el carné de identidad. Los bancos no quieren gente sola y mira que abunda. Así están las cosas.