Confirmado que el Euríbor está estancado. En lo que va de año no se ha movido entre el -0,188% y el -0,192% en las cotizaciones diarias y en una franja mucho más estrecha en los cierres mensuales.
El Euríbor, que acaba de cerrar mayo en el -0,188%, sólo un poquito por encima que en abril, lleva desde noviembre despidiendo los meses entre el -0,189% y el -0,191%, lo que hace que la progresión sea lineal por primera vez en más de 10 años.
Esto explica por qué quienes revisen la cuota semestral de su hipoteca con el Euríbor de mayo encontrarán con que de media sólo sube 1 € al mes. Es porque el Euríbor en noviembre del año pasado cerró exactamente en el -0,189%, casi la misma cifra que ahora en mayo.
En cambio, quienes revisen su hipoteca de manera anual notarán una pequeñísima rebaja media de 1 € (12 al año), la más raquítica hasta ahora. Sucede así por el estancamiento que sufre, lejos de la progresión alegre de bajada que traía hasta hace medio año.
El estancamiento del Euríbor significa que la banca está muy conservadora esperando a ver qué hace el Banco Central Europeo (BCE) a partir de septiembre, cuando termina el programa de compra de deuda de países de la zona euro. Si acaba, como está previsto, el Euríbor empezará a subir muuuy lentamente. Si lo prolonga, como ya se rumorea que puede ocurrir, lo más probable es que el Euríbor siga estancado en esta frontera del -0,20% hasta que el BCE acabe con este programa, llamado QE, o suba los tipos de interés.
Los tipos de interés son el precio del dinero, o sea el interés que cobra el BCE por prestarles. De él depende el Euríbor, que es lo que se cobra la banca por prestarse entre sí (bueno, lo que dicen los bancos que se cobrarían… Es especulación, no cifras reales). Y lo que se presta la banca depende de a cuánto consigue comprar dinero en el BCE.
Ahora mismo el BCE les cobra un 0,40% por guardarles el dinero, porque quiere que fluya, no que lo guarden. Mientras eso no cambie y el precio del dinero siga en el 0%, es poco probable que suba el Euríbor. Para la banca es una pesadilla porque les hace ganar menos dinero, especialmente con las hipotecas de hace 15 años, que tienen diferenciales por debajo del 0,50%. En cambio, para los clientes es una bendición que les regala las cuotas más baratas de su vida, algunas a cero interés en el caso de los diferenciales iguales o inferiores al 0,19%.
La previsión es que lo que queda de año siga estancado o suba ligerísimamente. En 2019 se espera que puead volver a positivo, aunque seguro que la previsión se retrasa nuevamente, como lleva pasando un par de años. Igual que se cree que en 2020-2021 volverá a positivo, en torno al 0,20-0,50%, pero está por ver. Ahora se dice que el Euríbor estará en el 1,5% durante las próximas décadas… Y los bancos lo saben, por eso se empeñan tanto en el tipo fijo.
Dependerá de si la economía crece como mínimo al 2%. Mientras no sea así el BCE dejará los tipos de interés en el 0% y los hipotecados seguiremos tan felices y contentos con cuotas mínimas que podrían estabilizarse si la economía sigue tan estancada como el Euríbor.