Los bancos nos tienen en una encrucijada con las hipotecas: no sueltan un chavo y nos quieren endosar sus pisos
Bienvenidos al país que se paraliza en agosto. Luego bien que criticamos a los habitantes de otras latitudes donde hace mucho calor, pero aquí no cortos y muy perezosos, cuando llega agosto cerramos un chiringuito y abrimos otro.
Como yo no voy a ser menos porque esto de espiar en los vericuetos hipotecarios es harto fatigoso, especialmente en los tiempos que corren, y como quiero dejaros descansar también unos días, este mes nada más que voy a hablaros de dos cosas relacionadas con las hipotecas: de dónde venimos y a dónde vamos.
Venimos de un país cuya bonanza nos explotó en la cara a finales de 2007, aunque nada fue oficial ni reconocido por el Gobierno hasta un año después, cuando ya era tarde. La bonanza estaba basada en muchas cosas, sobre todo que cualquiera recibía un crédito para lo que fuera, incluido comprar casa y amueblarla, y la especulación nos puso los pisos entre los más caros del mundo.
El Euríbor subió, dejamos de pagar la hipoteca y perdimos el trabajo mientras el Gobierno nos miraba perdiendo el tiempo como los astutos futbolistas que tardan mucho en sacar cuando quieren que el árbitro pite el fin del partido.
Después el Euríbor empezó a bajar, pero ya era demasiado tarde. Los que no tienen cláusulas suelo ni cosas impronunciables como los swap, y que seguirán teniéndolos porque el PSOE votó en contra de prohibirlos, se beneficiaron de bajadas en la cuota de la hipoteca. La última, la que se vivirá este mes, porque al que viene las hipotecas empezarán a ser más caras.
Los promotores inmobiliarios no pudieron pagar sus deudas con los bancos y estos se quedaron los pisos, acumulándolos de forma tan indecente que ya no saben qué hacer con ellos. Como los bancos se niegan a bajar el precio de los pisos invendidos de su stock, los demás nos seguimos aguantando comprando caro y vendiendo barato.
Otro pequeño detalle es que los bancos han cerrado el grifo. Recelan de prestarse dinero entre ellos, apenas nos lo prestan a nosotros, se lo perdonan a los políticos y guardan lo que pueden mientras el Banco de España tapa todos sus desaguisados.
El último año ha sido uno de los más duros de la crisis, con reforma laboral insertada de tapadillo de por medio, y todo apunta a que seguiremos igual. Nos subieron el IVA, nos quitaron la deducción por compra de vivienda habitual, el cheque bebé y no sé cuántas cosas más, y mientras tanto el Ministerio de Vivienda siguió haciendo de las suyas, o sea nada o poco y mal hecho.
¿Pero qué os voy a contar que no hayáis sufrido en propias carnes? El próximo día veremos hacia dónde vamos. Entre tanto, descansad mucho y no hagáis nada que yo no haría 
Yo estoy sufriendo un swap y ya he denunciado al banco. No tengo claro que sirva para algo, para que me apliquen condiciones más justas, quiero decir, porque para figurar como demanda y molestar al banco sí servirá, espero.
el problema es que cuando uno firma la trampa ya es tarde,aunque por intentarlo que no quede,tengo comprobado que los bancos tratan diferente a los pringaos como yo que a otros clientes,y a algunos les cambian las condiciones si ven que es gente pudiente.
O les conceden directamente la hipoteca. Hay bancos que lanzan hipotecas con condiciones estupendas pero solo para ricos; las condiciones son tan exigentes que directamente descartan a la gente, ahorrándole al que te atiende en la sucursal de que tenga que negarte el préstamo.
es cierto,la criba es dificil de superar,a ver quien tiene liquidez para afrontar el 20% que el banco no presta a no ser que haya un buen aval y otro 10% para las escrituras.
igual pensaban que a pokitos salvarian la sucursal y sus puestos de trabajo,en mi pueblo habia 4 bbva y en 3 años han cerrado 3,entonces teniendo en cuenta que este banco es de los mejores de europa hay que imaginarse cuantas cajas de ahorro van a sobrar,en cuanto suba el euribor va a armarse la de san quintin,jeje estan como para prestar 200 o 300000 euros a una pareja de mileuristas por un zulo de 60 metros.
voy a comentar algo que me sucedio el otro dia con una sucursal del bbva,mi parienta tiene una tarjeta de debito en esa entidad que nada mas la saco para poder coger viajes en avion por internet,el otro dia la llamaron diciendo que tiene una deuda de 22 centimos y que por favor se pase cuanto antes para abonarla,como la cuenta estaba en positivo se supone que clavarian alguna comision,el caso es que por falta de tiempo no pudimos pasar para pagar esa cifra irrisoria y hace unos dias ingresamos un cheque en esa cuenta y cuando fuimos a sacar dinero nos trago la tarjeta y entramos a ver que pasaba,nos topamos con una tia superborde que nos dijo que si se la habia tragado por algo seria,lo miro en el pc y dijo que la habian anulado por 22 centimos y que si queriamos otra que fueramos a la sucursal central que la suya la iban a cerrar en 2 meses,manda narices que le llamen a casa los del banco para pagar 22 centimos
ya echaba yo de menos sus comentarios señor, asier; se esten o no de acuerdo con ellos siempre es un placer leerlos.
me alegra que valore usted los ratillos que paso por aqui escribiendo,aunque ahora mismo apenas tengo tiempo por trabajo,antes como andaba en paro podia participar mas,aunque no soy ningun entendido en la materia y la ortografia que uso es deficitaria espero se me entienda lo que suelo escribir,jeje. un saludo alcoleano
No podemos ser tan ingeniosos que el movimiento de la moneda del Euro vaya a impactar de una manera directa en el servicio hipotecario. Si así fuera, el dólar por ejemplo ya habría repuntado con el sólo hecho de la reapertura económica. Hay que tratar de establecer que los dos puntos, tanto el del movimiento de la moneda como el movimiento hipotecario son factores independientes, y las personas más inteligentes son conscientes de las ventajas y de los retos que contiene esta cooperación cuando se produce.
Es cierto, pero tal y como están las cosas dudo mucho que el euro repunte, lo que nos convierte aún en más pobres cuando salimos de la eurozona. Ya podrían subir el euro y bajar nuevamente el Euríbor, ¿no te parece?