La banca ignora a los que quieren hipotecarse solos

¿Solo o con mala leche?

¿Solo o con mala leche?

Ser single ya no es tan fácil como antes. Hasta no hace mucho, era una persona soltera (que no solterona, oiga), tirando a joven, con ingresos interesantes, independizada y buen tren de vida.

De esos quedan cada vez menos y no porque se emparejen como locos. Más bien es que el tren de vida se ha perdido, los ingresos se han esfumado y lo de irse de casa de los padres es más difícil que enseñarle educación para la ciudadanía a Chuck Norris.

Los jóvenes deberían ganar el doble para poder comprarse un piso que no llega a ni 50 metros cuadrados, y al que tienen que dedicar de media más del 60% de sus ingresos.

Si las hipotecas para jóvenes son casi inexistentes, la oferta que tienen las personas solas es prácticamente nula. Y mira que es un nicho de mercado cada vez más amplio. No hablamos sólo de solteros, también de separados, divorciados, viudos…

Están ahí pero la banca los ignora deliberadamente. Tienen necesidad de acceder a la vivienda pero con un sólo sueldo, que en general no es la pera, no se pueden ir más que de alquiler a un piso inferior en el que vivían, o a casa de sus padres, lo que es de agradecer, pero lamentable y deprimente.

Un tercio de los jóvenes entre los 24 y los 35 años todavía no se ha emancipado. En muchos casos no es por falta de ganas, y en otros se largan de casa alquilando porque comprar no está a su alcance.

La banca se ha vuelto muy elitista eligiendo a quién le deja el dinero. Y no te digo que no tenga razón a veces: no es plan de dar dinero a cualquiera como se hizo antes de la crisis, pero también debería fluir más el dinero.

Esta responsabilidad la tienen todos, especialmente las entidades rescatadas con nuestro dinero. O ganas bien de pasta o ningún banco te aceptará como pareja, por mucho que le prometas serle fiel todos los días de tu vida. ¿Y quién gana más de 2.000 euros? Haberlos haylos, pero no muchos menores de 35.

Con menos de ese sueldo la banca es reacia a casarse contigo. ¿Y quién termina los estudios, se pone a currar y gana ese dineral, en una profesión legal y honesta? Decídmelo, por favor, que me reciclo en un periquete.

La oferta hipotecaria se centra en parejas, con trabajos estables, antigüedad laboral, que ganan como mínimo 2.000 € entre los dos -algunos bancos exigen mucho más- y si son jóvenes, mejor que mejor. La oferta está pensada para parejas y familias. La banca pasa de los que no compran un piso a pachas y eso que son 8 millones de personas, de las que cuatro millones y medio viven por fuera de casa de los padres.