Qué cierto es que la cuerda siempre se rompe por el extremo más flojo. Y qué puñeta es que ese extremo siempre sea del que (de)pendemos nosotros, ya sea como consumidores, hipotecados, ciudadanos… En definitiva, pringados de un sistema que no está montado para nosotros sino para beneficio de los que lo han montado, aunque nos intenten vender lo contrario.
Después de recopilar información de los bancos, porque les ha obligado a que se lo cuenten, el Banco de España dice que sus hijitos protegidos, las entiendades financieras, tienen 178.000 millones de euros que son muy difíciles de cobrar porque corresponden a hipotecas de gente o inmobiliarias que no están pagando o tienen pinta de que no van a pagar.
Estos millonacos suponen el 52% de todo el dinero que los bancos tienen prestado para la vivienda, pero allá se aguanten si no cobran porque con las ayudas del Estado, las fusiones y el encarecimiento de las hipotecas están saliendo del bache económico. Lo peor de todo es la ley del embudo que están aplicando a los que no pagan.
Me refiero a la tremenda injusticia que es que los bancos sí acepten la dación en pago a las promotoras inmobiliarias, pero no a los ciudadanos. La dación en pago es que tú le des al banco el piso y con eso canceles la deuda. No como ahora que le sigues debiendo dinero aun habiéndole dado la vivienda.
A las promotoras sí les está aceptando los pisos, pero a la mayoría de los hipotecados no, y eso que las inmobiliarias tienen una morosidad del 15,9% frente al 3,5% de las familias que no pagan la hipoteca. ¡Una quinta parte! Apenas algunos afortunados que consiguen negociar, algunos inmigrantes y otros que tienen sentencias judiciales a su favor lo consiguen.
Esta guarrería que están haciendo la ha denunciado en el Parlamento la coalición electoral ecologista de izquierdas Iniciativa per Catalunya Verds – Esquerra Unida i Alternativa, que se da a conocer con las siglas ICV-EUiA. Critican que los bancos apliquen un doble rasero y quieren que si hay dación en pago sea para todos y con carácter retroactivo.
El colmo es que los bancos juegan con dos barajas: reciben del Banco Central Europeo (BCE) 490.000 millones € para que se arregle la situación y luego no los hacen circular entre los que necesitan el crédito para sobrevivir y para reactivar la economía. Entre unas cosas y otras, ¡así no se puede arreglar nada! Así no se sale de la crisis.
No me lo puedo creerrrrrr! Vivimos en el pais de los injustos.
si hay dación para las inmobiliarias, algunos inmigrantes y los que llevan papeleos con los abogados, tendrían que hacerlo a todos por igual.
Vaya mier….de bancos y de gobiernos que no meten cartas en el asunto y pasan, pasan y pasan, como el Poker cuando no vas a hacer nada de nada.
Esto demuestra que los bancos solo hacen lo que quieren, no lo que pueden, por mucho que vayan llorando por ahí con que sus finanzas no son las mejores…. La dación en pago sería posible en muchos más casos, pero dejarían de ganar dinero.
A mí también me indigna esta injusticia.
No puedo menos que preguntarme por qué los bancos hacen esta distinción, y sólo se me ocurre una respuesta: a las inmobiliarias les aceptan la dación en pago porque NO HAY OTRA COSA.
Una inmobiliaria (y por extensión cualquier empresa), si quiebra, jamás pagará las deudas a sus acreedores. Si eres acreedor y puedes quedarte con un piso como garantía … un canto en los dientes. El cierre (liquidación) de una empresa significa su MUERTE y la de todas sus deudas. A menos que tenga avalistas, claro.
Una familia que no puede pagar su hipoteca, no ha muerto. El banco se quedará el piso, pero el resto de la deuda no lo perdona porque sabe que antes o después, esa familia acabará teniendo algún ingreso y entonces … ZAS, embargado.
Si no se impone la dación en pago por ley, me temo que los bancos seguirán haciendo LO QUE LES INTERESE. Y si hacen distinciones será PORQUE LES INTERESA. Que nadie crea que los bancos piensan en ninguna clase de labor social, lo único que quieren es ganar dinero … y cuanto más, mejor.
Estoy totalmente de acuerdo contigo. A las empresas que quiebran es difícil perseguirlas, están muertas. A las familias que quiebran se las persigue a muerte, hasta sangrarlas hasta el último céntimo. Es una gran injusticia, gracias por informarnos, Matahari.