Ibercaja acaba de mover ficha en la guerra hipotecaria que vivimos desde hace más de un año, cuando Bankinter se atrevió a poner su oferta en Euríbor + 1,95% en un momento en el que nadie bajaba el diferencial del 2% ni por asomo.
Con varias hipotecas nuevas cada mes, más las que mejoran sus condiciones, la de Ibercaja no sería noticia si no fuera porque se sale del tiesto por el dinero que presta y el plazo que te deja para devolverlo.
Lejos del tope del 80%, del que parece no moverse ninguna entidad, y si acaso se mueve es a la baja, Ibercaja presta hasta el 100% del valor de tasación o de compraventa del piso (el menor de los dos), a devolver en 35 o 40 años, según la edad de los titulares. Ambas cosas eran habituales antes de la crisis pero ahora son más raras de ver que un perro verde, salvo para pisos de bancos.
Los ingresos para optar a esta Superhipoteca Ibercaja no son nada exigentes: un mínimo de 2.000 € al mes, que aunque no todo el mundo los gana, es un límite bastante más accesible de lograr -al menos entre dos personas- que los que marcan otras entidades.
Pero en esto acaba el chollo. Aunque deja entrever que hay interés fijo al principio, luego cobra Euríbor + 1,70%, un diferencial más alto que el 1,50% que ya empieza a ser la tónica habitual en las mejores hipotecas. Sin embargo, lo puedes pasar por alto si necesitas que te presten el 100% porque con los ahorros no te llega para pagar la entrada.
Domiciliar la nómina y al menos tres recibos también está chupado, incluso contratar un seguro de hogar que al fin y al cabo te viene bien y necesitas para tener un seguro de incendios, el único obligatorio al firmar una hipoteca. Prácticamente cualquiera con ingresos y una casa puede hacerlo.
Pero a partir de aquí es cuando la cosa se pone exigente de verdad. Seguro de vida, seguro de protección de pagos, pagar con tarjeta al menos 1.000 € en 6 meses, mantener un saldo medio en depósitos y tener un fondo de al menos 10.000 € son demasiadas cosas. Algunas, palabras mayores.
Y también hay comisiones: un 0,5% por abrir la hipoteca y otro tanto por dejarla antes de 5 años. Si es más tarde, sólo cobran el 0,25%. Lo mismo te cobran por amortizar capital antes de tiempo.
Entonces… ¿Compensa que te dejen todo el dinero para comprar la casa, con un diferencial que está por encima de mercado y por el que tienes que hacer de todo o es mejor intentar ahorrar y pedir una hipoteca que te permita menos esclavitud y una vida más desahogada? Pues como decía Antón Pirulero: cada cual que atienda su juego…
Ah, además te cobran en IBERCAJA gastos de mantenimiento (unos 35 €), salvo que SÓLO tengas que pagar la hipoteca. Te viene recogido en las cláusulas del préstamo hipotecario
Gracias por la información. Me molestan muchísimo esas comisiones. ¿Es que no sacan ya bastante dinero con la hipoteca como para cobrar mantenimiento de cuenta?
Buno, Ibercaja chupa la sangre de los futuros hipotecados con estas condiciones. Creo que lo importante es conocer el contrato hipotecario y ver en qué porcentaje se incrementa el diferencial (1,70% muy alto ), si abandonas algunos de los productos que te obligan a contratar como: Seguro de vida, seguro de protección de pagos, pagar con tarjeta al menos 1.000 € en 6 meses, mantener un saldo medio en depósitos y tener un fondo de al menos 10.000 € son demasiadas cosas.
Si la penalización por abandonar productos ( a excepción del seguro de incendios) es incrementar el diferencial en 0,05% merece la pena abandonar los más posibles porque se sale ganando.
Claro, todo es hacer cálculos, a mí me baja un 0,05 % el diferencia por tener una visa de crédito con un mantenimiento anual de 24 euros que no necesito para nada esta visa porque tengo una gratuita de Ing. Pero esta bajada del diferencial, me supone pagar 50 euros menos de cuota al año, con lo cual si me sale a cuenta.
Ok. Todo es cuestiónde hacer números. Pero cualquier seguro de vida, de protección de pagos, pueden suponer una cuota anual de entre 600-800 euros. Y un 0,05%, en función del importe hipotecario, no supondrá más de 50-100 euros año, en números redondos.