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Los bancos sí dan hipotecas a sus empleados

Sigo fliping in colours con el morro del BBVA y su total parcialidad para la concesión de hipotecas

Sigo fliping in colours con el morro de los bancos y su total parcialidad en la concesión de hipotecas

Increíble pero cierto. Asombroso pero verídico. A-lu-ci-nan-tehh… Sabemos que los bancos y las cajas son unos convenidos y que solo nos dan la pasta, si es que la encuentran en algún cajón tras las pérdidas y las fusiones, para lo que les conviene, a quien les conviene y cuando les conviene.

Pero una cosa es saberlo, tristemente intuirlo detrás de cada negativa de cada director de sucursal, y otra es que te lo restrieguen por la cara. ¡Vaya chupinazo!

Siguiendo la estela de lo que ya hiciera el Banco Santander hace un año, su archienemigo BBVA ha mandado una carta a sus empleados, incluyendo los jubiletas, metiéndoles por los ojos los pisos embargados o quedados en prenda de constructoras arruinadas que no consiguen vender ni en un mercadillo a 3×2 con un megáfono. ¡El braga y la tanga, oiga, cómo los tengo!

Las condiciones son para indignarse y caerse de espaldas: el 110% del valor del piso, o sea toda la casa -valga lo que valga- más el 10% que siempre se calcula para pagar los gastos de la compraventa, léase IVA, notario, registro de la propiedad, tasador y otros chupatintas por el estilo que se forran a nuestra cosa tras estudiar una oposición (o no) que tirita el Misterio.

Cuando nadie está dando más del 80% va el BBVA y se aparece como el Espíritu Santo a sus empleados. El interés es, gua-gua-guaaa, Euríbor – 0,25%. Sí, he puesto menos. Juassss.

Además, les ofrece descuentos de entre el 10% y el 15% sobre los precios de los pisos que anuncia en su web, financiando TODAS las operaciones y hasta 40 años.

El período de carencia, en el que sólo se pagan intereses, es de tres años y les deja pagar un 30% del préstamo al final de la vida de la hipoteca. ¿Habías visto u oído algo igual alguna vez? ¡¡Yo no!! Aysssss…

Qué injusto. No entiendo por qué no ofrece estas condiciones, o unas un poco menos buenas pero no malas o inexistentes, a los demás aunque no trabajemos en el BBVA sí tenemos ingresos regulares o trabajos estables y seríamos capaces de devolver el préstamo.

Seguro que si lo hicieran cumplirían antes el objetivo de fundir al menos un 30% de los pisos que tienen hace más de 2 años como les he pedido el Banco de España. Ellos se lo pierden.

Lo siguiente si no pican sus empleados, ya lo estoy viendo, es cambiarles el incentivo de empresa, la paga extra, la cesta de Navidad, el jamón, las vacaciones y hasta la nómina por un piso, un trastero o un garaje.

¿Y lo siguiente? ¿Será tirar nuestra vida por la borda y las casas por la ventana? ¿Más que ahora?

Autoservicio de nóminas e hipotecas

A la rica hipotecaaa... ¿Quién quiere una? ¡Tú te la guisas y tú te la comes!

A la rica hipotecaaa... ¿Quién quiere una? ¡Tú te la guisas y tú te la comes!

¿Se puede ser más cutre salchichero que el BBVA gastándose un dineral en Marketing para parecer lo contrario? El banco azul de la colección de siglas se ha propuesto superar a su archienemigo, el maléfico Santander de Botín, con una nueva estrategia comercial que, para variar, incluye las hipotecas y las nóminas.

Ay (suspiro)…  Las hipotecas… Antaño tan accesibles y cercanas y ahora tan extrañas como las meigas que, haberlas, haylas, pero nadie sabe dónde están.

La nueva tomadura de pelo del BBVA nos pone ante los ojos una hipoteca de, por favor que nadie se espatarre, Euríbor + 0,29% en función del grado de esclavitud que estés dispuesto a aceptar con Uno-e, su olvidada y oxidada plataforma de banca on-line a la que han lavado la cara por el módico precio de 2 millones de euros (campaña de lanzamiento incluida).

Si abres una cuenta, contratas el seguro de hogar, el seguro de vida, las tarjetas, y domicilias la nómina y los recibos, siempre que pases los filtros pertinentes y la selección nacional de hockey patines gane el Mundial sub-16, la hipoteca es tuya.

Te venden que todo es súper fácil de contratar y que, aaaaaaaah, amigo, ¡te lo haces todo tú mismo! Claro, ahorrando en personal, oficinas, papel, luz y mandangas varias yo también monto una oficina on-line que prometa el oro y el moro para todo el que quiera jugar a ser el banquero Juan Palomo.

Está por ver si funciona de rechupete y si podrá hacer la competencia a las cuentas roja, naranja, azul y del arco iris, captando los 100.000 clientes que aspira a succionar de otras entidades en tres años.

Además de prometer hipotecas, que también está por ver si finalmente empiezan a darlas, a pesar de asegurarlo en campañas anteriores, en las que ya hacían hincapié en el mundillo on-line, te aseguran que si domicilias la nómina con una permanencia mínima de dos años te regalan, así por la patilla, el 20% en dinero contante y sonante. ¡Juas! Casi prefiero el dinero y con él ya me compraré la videoconsola, el televisor o el juego de cuchillos para cargarme el póster de Rafa Nadal mordiendo algún trofeíllo.

También te dan tarjetas de crédito y débito incluidas, no cobran comisiones por transferencia u otros servicios, ni mantenimiento por la cuenta, pudiendo usar los cajeros del BBVA sin coste adicional. Al menos suena guay.

Como digo, suena guay, pero habrá que ver si reluce tanto como anuncia la campaña porque, mira que son cutres, se lanzan a lo fácil, a los clientes online que nos hacemos todo, hasta imprimir el formulario y mandarlo. ¿Quieres probar suerte?

Al abordaje de los hipotecados

El presidente del BBVA poniendo ojitos para que le des tu hipoteca

El presidente del BBVA poniendo ojitos para que le des tu hipoteca

Con la mala leche de un pirata y los modos de una damisela, el BBVA se ha liado la gomina a la cabeza y, sin cortarse un pelo, ha lanzado una campaña para robar descaradamente a otras entidades bancarias clientes con hipotecas ya concedidas.

En los tiempos de la burbuja, las entidades financieras solían hacer alguna que otra campaña con este fin, pero ahora el pirateo es incesante y, ante la necesidad de tener pasta, los bancos y cajas están dispuestos a hacer lo que sea, aunque eso signifique romper la regla no escrita de sacarse los ojos entre ellos.

Después de comprometerse a regalarte el 1% de la hipoteca de la casa y de jurar y perjurar (solo en la publicidad, of course) que conceden hipotecas, este banco ha pasado a palabras mayores.

Con la que llama hipoteca online BBVA, te regala 2.000 euros nada más llegar y te pone unas condiciones de Euríbor + 0,49% (un chollito para los diferenciales que hay por ahí) a cambio de, qué minucia, domiciliar recibos y la nómina y esas cosillas tristemente habituales en otras hipotecas como los seguros de vida y hogar, el plan de pensiones y el chocolate del loro.

Han demostrado ser bastante rastreros a la par que bastante listos. ¿Para qué gastarse los cuartos en estudiar a gente que ya han estudiado otros con la conclusión de que pueden ser solventes?

Para tapar los agujeros de los pisos embargados e invendidos y del dinero prestado a inmobiliarias, políticos y demás morosos VIP, donde por supuesto no estamos ni autónomos, ni pymes, ni hogares, los bancos ya no saben de dónde sacar los cuartos para que papá Banco de España no les apriete más las clavijas por no hacer los deberes ni estar a la altura de las circunstancias en la crisis, que ellos mismos ayudaron a provocar.

El resultado es esta apuesta cobarde pero tal vez efectiva que trata de seducirnos con placeres como aplazar dos cuotas de la hipoteca al año, rebajas de hasta el 30%, ampliar o reducir los plazos de devolución según nos convenga y cambiar el tipo de interés variable a fijo.

Lo novedoso es que tienes que contratarlo todo online; novedoso para el BBVA porque éste es un viejo sistema para otras entidades de color azul, naranja e incluso para las hipotecas arcoiris que concede San Pedro a las almas más desesperadas. Toma ahorro de costes en atención al cliente y papeleos asociados y toma ahorro de gente mendigando pasta en las sucursales.

Lo demás es lo de siempre: solo dan el 80% del valor de la tasación del piso y, ajajá, solo para préstamos superiores a 150.000 euros. Una maniobra más del banco de las mil consonantes que no abre camino para los que quieren hipotecarse por primera vez y de una vez por todas.