Lo del Euríbor es muy pero que muy fuerte. El indicador al que están ligadas las cuotas de casi todas las hipotecas a interés variable en Ejpaña ha cerrado en el 0,65%, la cifra más baja de toda su historia.
Pero bueno, esto ya no nos impresiona porque parece que casi lo esperábamos, después de llevar más de un año bajando y marcar un nuevo mínimo histórico tras otro en los últimos tiempos.
Éste es el segundo mes consecutivo que está por debajo del precio del dinero, que el Banco Central Europeo (BCE) mantiene en el 0,75% y por debajo de lo que cualquier mago de la imaginación hubiera podido pensar jamás.
Esta maravillosa noticia para los que revisen su cuota con el dato de octubre y no tengan la dichosa cláusula suelo supone un ahorro mensual de hasta 100 euros, que al año pueden suponer hasta 1.200 euros. ¿Y eso? Pues porque en octubre del año pasado, el Euríbor cerró en el 2,11%.
Lo digo siempre pero no por ello es menos cierto: ésta es una gran noticia en los tiempos duros de paro, recortes y subida de precios que estamos viviendo. Si ahora ya hay muchos desahucios, sobre todo de las hipotecas ejecutadas cuando el Euríbor estaba por las nubes, no quiero ni imaginar cuánta gente perdería su casa si este indicador no estuviera más bajo que la confianza del PSOE en Alfredo Pérez Rubalcaba.
Aunque el precio del dinero se quede en el 0,75%, lo que todavía está por ver, en los próximos meses todo apunta a que el Euríbor seguirá bajando. Además, parece que esta cifra tan baja seguirá así durante un tiempo largo, al menos mientras la economía esté más por los suelos que una fregona.
La parte mala es que los bancos quieren seguir ganando dineroy para las nuevas hipotecas están poniendo unos intereses estratosféricos, a fin de que el Euríbor bajo no afecte a sus ganancias.
Aunque estuvieran manipulando el Euríbor, algo que están intentado demostrar, de momento hay muchas familias españolas que se benefician de que esté tan bajo, así que aún no corre prisa que cambien la forma de calcularlo.
Otro gallo cantaría si estuviera tan alto como laaaa lunaaa, ay-ay… Pero como no es así, no nos corre prisa la propuesta de la Comisión Europea de que se calcule sobre el interés al que realmente se prestan dinero los bancos en lugar del interés al que dicen que se dejarían el dinero.
Sólo estaríamos impacientes por cambiar las reglas del juego si nos beneficiaran, pero como eso está por ver, un mes más podemos decir eso de Virgencita, Virgencita, que me quede como estoy…