Queridos espías, infelizmente incorporados o felizmente de vacaciones:
Después de resumir por qué nos encontramos enfangados con la hipoteca al cuello y la crisis en los talones desde hace 3 años, aprovecho este último artículo del mes de agosto para aventurar qué pasará cuando septiembre reactive la vida inmobiliaria, laboral y financiera de este país.
Por un lado, el Euríbor nos amargará el final del verano como parte de la tendencia alcista que mantiene desde marzo. A las mieles de bajadas de cuota a pesar de las subidas de Euríbor, le sucederán las hieles de subidas de cuota por primera vez en año y medio. Asín es: el Euríbor volverá a encarecernos el préstamo, aunque nos encontremos en mitad de un ERE, aunque estemos en el paro, aunque ni España ni nosotros hayamos empezado a superar la crisis.
Será asín porque los bancos no se fían entre sí para prestarse dinero y el Euríbor no es más que el precio al que las entidades financieras se prestan los cuartos que luego nos represtan a nosotros.
Los bancos seguirán atesorando pisos indecentemente y con pocas posibilidades de venderlos mientras dejen los precios por las nubes, lo que perjudica a compradores y a vendedores particulares de pisos de segunda mano.
Para echarles una manita ya está el Ministerio de Vivienda, cuya eliminación nos ahorraría 700 millones de euros al año y muchas paridas. La manita que a nosotros nunca nos echa la recibirán a través de la Sociedad Pública de Alquiler, cuyo nombre en coña es SPA, que aumentará su estrecha colaboración con bancos y cajas para poner en alquiler los pisos invendidos que nos embargaron marranamente.
El Gobierno seguirá fingiendo que hace algo mientras espera (im)pacientemente las elecciones de 2012 (qué horror, lo que queda todavía) intentando no desgastar su maltrecha imagen.
Los sindicatos materializarán la huelga general de tapadillo, esa pantomima convocada para el 29 de septiembre, cutremente planificada para parecer que se protesta pero sin cargar contra el Gobierno, no vayamos a pensar que UGT tiene algo contra el PSOE, amigos para siempre-be my lover-be my friend.
Algunos de nosotros tal vez nos animemos a pedir una hipoteca, siguiendo la tendencia de las últimas estadísticas que reflejan que la petición de hipotecas ha aumentado por primera vez desde mediados de 2006.
Oh, heavens, también ha aumentado la concesión de hipotecas en junio: un 1,4%, el mayor incremento desde abril de 2009. ¿Será porque al mes siguiente nos subían el IVA y nos hemos lanzado a por todas en plan ahora o nunca?
El precio de la vivienda ha caído unas décimas en julio, caída tímida y ridícula que nos deja claro que no está dispuesto a ceder ni un céntimo más. ¡Hasta septiembre!