Según el informe PISA 2015, el alumnado español está pez en Economía. Nuestros chavales suspenden en cultura financiera, quedando los décimos de 15 países, sólo por delante de Lituania, Eslovaquia, Chile, Perú y Brasil, y por detrás de casi todos los países europeos.
Así nos va después… Los que ahora son alumnos, mañana serán ahorradores, usuarios de tarjetas y titulares de cuentas, hipotecas y otros productos. Si no tienen conocimientos financieros la banca les tomará el pelo en masa, como ha ocurrido con generaciones anteriores.
Entre la confianza ciega que ha habido en la banca y las pocas ganas de informarse, se han cometido verdaderos atropellos y abusos que siguen y seguirán dando guerra en los tribunales (cláusula suelo, gastos de hipoteca, multidivisa, IRPH, etcétera).
Para evitar errores pasados y asegurarse de que quien pide una hipoteca conoce sus riesgos, derechos y obligaciones, el ministro de Justicia planteó que, antes de firmar, se pase un test para comprobar que se conoce todo. Después se dijo que el notario pasaría este test y pararía la firma de la hipoteca si el cliente no tiene información adecuada y suficiente.
Pero todavía no ha visto la luz la reforma de la Ley Hipotecaria, que en España lleva tantos años de retraso que en Europa ya nos han multado y dado algún que otro tirón de orejas. Además de bajar la comisión por amortización y cancelación del préstamo, entre otras cosas, la Unión Europea plantea que haya que pasar un test de idoneidad.
¿Un qué? Un examen de preguntas cortas en el que, durante el proceso de búsqueda, demuestres si estás o no preparado para tener una hipoteca. De momento, el intermediario financiero RN Tu Solución Hipotecaria saca pecho porque es el único que incluye algo semejante en su página web. Además de pedirte bastantes datos personales que no vienen al caso y que no tienes por qué poner porque esas casillas no aparecen marcadas con asterisco, te realiza 20 preguntas cortas, que tardas unos 5 minutos en responder. De ellas sólo merecen la pena las 11 últimas, las demás son cotilleo puro y duro sobre tus datos y tu situación personal.
Te hace ver que el Euríbor se puso por las nubes (5,393%) en julio de 2008, que tu cuota subiría al doble si eso volviera a ocurrir, que hay varios índices… Te pregunta qué es un diferencial, te habla del embargo, de la dación en pago y de los gastos que acarrea una vivienda en propiedad, además de la hipoteca.
Está bien, pero se queda escaso. Para saber si puedes hipotecarte necesitas saber más cosas, no habla de la vinculación, ni de los gastos de las hipotecas, ni del interés fijo el primer año o la diferencia entre préstamos fijos o variables. Un montón de temas que sí tratamos en profundidad a menudo en este blog y que debes conocer para hipotecarte y elegir la mejor ocpión.
Puedes hacer el test para orientarte y, tanto si apruebas como si suspendes, sigue informándote y aprendiendo. El banco hará sólo lo que le obliguen. No tiene interés particular en que tengas información, sólo lo hará para evitar futuras demandas judiciales.
Viendo cómo va de lenta la reformar hipotecaria, este test no estará en España de forma masiva hasta dentro de unos cuantos años. Es una pena, porque vendría fenomenal que cada banco tuviera uno en su web. Además de darles buena reputación e imagen de transparencia, ayudaría a que la gente aprendiera y estuviera más informada.
Esto evitaría firmar una hipoteca sin tener conocimientos suficientes o que te endeudes por encima de tus posibilidades. El banco debe asegurarse de que lo entiendes todo, en lugar de explicar algunas cosas rápidamente y pretender que gente sin conocimientos financieros se quede con toda la informacion y la comprenda.
Hay que explicar días antes de la firma ante notario, porque ese día tienes la mente aturullada y, si no controlas el tema, no entiendes todo. Tampoco es momento de quejas y aclaraciones porque da vergüenza parar la operación de compraventa porque no estás de acuerdo con un par de cosas de las que acabas de enterarte. Lo dicho: prepárate bien para que no te vendan algo que no entiendes, de lo que te arrepentirás toda la vida.