Ahora que despedimos un año y damos la bienvenida a otro es un buen momento para recordar con qué bagaje hipotecario recibimos 2015, año en el que seguiremos sin desgravación fiscal para pisos comprados desde 2013.
Este año se ha confirmado la tendencia que se apuntaba finales del pasado: se abre nuevamente el mercado de las hipotecas. Tras Bankinter, Cajasur, ING y Santander, que fueron desgranando poco a poco ofertas con diferenciales en el 2%, antes nunca vistos, muchas otras entidades se han sumado a la guerra de precios hasta terminar el año con los mejores diferenciales entre el 1,6% y el 1,7%, y algunas hipotecas por el 100%.
Que bancos bastante reticentes a mejorar sus ofertas hayan entrado en liza, unido a que los punteros mejoren sus hipotecas cada vez que lo hace la competencia directa, hace pensar que en 2015 podremos ver bastantes diferenciales por debajo del 1,5% e incluso que podamos terminar el año en Euríbor + 1%.
La parte no tan buena es que se trata de hipotecas para clientes con perfiles altos, para los que sí se flexibilizan y adaptan las condiciones. Jóvenes, mileuristas y personas solas siguen teniéndolo difícil.
Otro punto a favor de los hipotecados sin suelo y sin IRPH ha sido la bajada del Euríbor. Tras la caída de los tipos de interés al hiper-mega-histórico 0,05% (lo que es casi poner el dinero a cero interés), el Euríbor no se ha hecho de rogar y ha bajado hasta el entorno del 0,3%.
Esto garantiza cuotas baratas durante al menos un año más, además de un Euríbor requetebajo durante 2015, cuando todo apunta a que este índice será sustituido por el Euríbor Plus, para que la banca deje de especular con él a base de dar cifras falsas que sólo benefician sus intereses.
Hablando de índices de referencia, el IRPH por fin desapareció en todas sus modalidades excepto el IRPH Entidades. Esto ocurrió a finales de 2013, si bien los efectos se han dejado ver este año. Los más afortunados han visto su índice sustituido por Euríbor + 1% mientras que los menos están con el IRPH Entidades, lo que les encarece el préstamo una media de 2.000 € al año.
Otros que siguen pagando más y esperando que su situación mejore son los que cargan con la cláusula suelo. Según el Banco de España, en 2013 desapareció de 12.224 hipotecas, esperándose buenas cifras (aún no disponibles) para 2014. Aún debemos lamentar que algunas entidades no lo han quitado de los préstamos ya firmados o no se plantean eliminarlo, por el momento, de su ofera hipotecaria.
Hay que celebrar que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea está dando caña, en temas como la vinculación o los desahucios, al sistema español para que introduzca cambios en nuestra legislación hipotecaria, obsoleta a más no poder, hecha para los ciudadanos y los bancos de finales del siglo XIX, cuando se daban pocas hipotecas y se protegía mucho a la banca. ¿Te suena?