El pasado 3 de octubre se celebró el Día de la Educación Financiera, y por ello hablamos de la iniciativa pionera que se lleva a cabo en varios institutos españoles.
La ignorancia financiera hace que ahorremos menos y nos timen más. Se confirma que es algo habitual con una encuesta reciente de HelpMyCash, que revela que la mitad de los que tienen una hipoteca no comprenden todo lo que han firmado. ¡¡La mitad!! Y eso de esta encuesta, que yo creo que también están los que creen que comprenden lo que han firmado y luego se sorprenden con cosas que desconocían.
Es una cifra escandalosa que debería reducirse a cero. Nadie debe salir del banco sin saber qué le han dicho. Antes de buscar hipoteca hay que estar bien informado a través de páginas como ésta, en la que publicamos artículos sobre todo el proceso de compraventa de una casa y hay que echar cuentas en los simuladores, de los que otro día hablaré en detalle.
Cuando los conceptos son conocidos o por lo menos te suenan, pídele al banco la FIPRE (Ficha de Información Precontractual), léela y pregúntale todo lo que no entiendas; es información general de sus hipotecas.
Cuando el proceso vaya adelante te darán la FIPER (Ficha de Información Personalizada), que son las condiciones que te ofrecen y que firmarás con ellos. A veces se usa como oferta vinculante. Si no, tienen que darte la oferta vinculante, que son las condiciones que vas a firmar ante notario y que tienen validez legal en caso de problemas posteriores.
Lee todo detenidamente en casa, aunque te lleve tiempo. Si no entiendes algo, señálalo y ve otro día al banco a pedir que te lo explique. Pero, por favor, no firmes una cosa tan seria y que te compromete tanto durante tantos años, sin saber qué es ni qué consecuencias tiene. De aquí vienen luego la cláusula suelo, el IRPH, las hipotecas multidivisa, intereses de demora por las nubes, comisiones carísimas y otras cosas
Para asegurarte de que todo es legal, no te quedes sólo con la opinión del banco, que a veces oculta información queriendo o sin querer. Recurre a expertos como el notario, más imparcial que el banco. Desde 3 días antes de la firma la notaría debe tener el contrato de la hipoteca y revisarlo a conciencia. En caso de que encuentre cosas raras o ilegales debe avisarte y asesorarte gratuitamente, pregúntale. Hasta hace poco un notario podía parar la firma de la hipoteca, pero han limitado su poder sólo a las advertencias al cliente.
Consulta con amigos o familiares expertos en el tema. Cuantos más datos tengas y más compares con varias personas mayor información tendrás. Si no hay nadie que controle de esto en tu entorno cercano, busca algún abogado especializado en vivienda.
La consulta puede ser gratuita a través del seguro de hogar, coche, salud… si cuenta con abogados especializados que resuelven dudas por teléfono. Si no, contrata a uno. La hipoteca es algo tan importante que la ignorancia te puede salir mucho más cara en el futuro. La información es poder y ahorra tiempo, juicios dinero y disgustos.