Las hipotecas siguen cayendo cosa fina filipina en España. Los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística, más conocido como INE, confiesan que en los 11 primeros meses de 2010, las hipotecas han caído de media en España un 6%. En cifras: antes había poco más de 600.000 y ahora apenas hay 566.000 hipotecas.
Menos mal que la cosa se iba a arreglar con las genialidades del Gobierno, ¿no? Anda, que si se llega a estropear, no quiero ni ver la leche -¿aún mayor?- que se hubieran pegado las cifras. Ni fin de la deducción de la hipoteca en la declaración de la Renta, ni subida del IVA, ni na de na.
Después de empezar el año pasado con cuatro meses de subidas, que resultaron ser un puro espejismo, las hipotecas ya suman siete meses consecutivos de caídas, entre otras cosas, porque ya vamos casi por el quinto millón de parados, la inseguridad en los trabajos aumenta y los bancos no sueltan un duro salvo para comprarte uno de sus pisos y siempre que el viento sople según su veleta.
Comparándolo con el noviembre anterior, este último mes de noviembre también ha sido desastroso, bajando las hipotecas un 14,6%. Estamos en niveles de 2001, claro que eso también puede ser bueno, porque hace 10 años no se había desatado aún en todo su esplendor la fiebre del ladrillo.
Las hipotecas en España caen en picado más rápido que las carreras de Alberto Contador y Marta Domínguez, y mucho me temo que ni dopando a los banqueros, a los pisos y al sistema entero, conseguiríamos aumentar el rendimiento del mercado inmobiliario.
¿Pues no que ahora andan diciendo que no se va a recuperar hasta, por lo menos, dentro de 5 años? Ojalá, lo firmaba yo ahora mismo, porque ya no me creo nada.
Si tuviera que atenerme a las previsiones de recuperación que se daban al principio de la crisis, de la crisis reconocida por el Gobierno, no de la real, que empezó un año antes, ya tendríamos que estar todos otra vez estupendísimamente en vez de estupidísimamente, que es como de verdad estamos.
Pero, hombre, si hasta la gentea la que dan una VPO está rechazando los pisos en masa porque no pueden pagar la entrada y nadie les presta la pasta… El crédito para comprar viviendas protegidas se ha reducido a la mitad en 10 años. Ahí es na, colega.
No sé yo cómo va a termimar esto: entre los que guapamente piden en el País Vasco que la vivienda sea un derecho exigible, los que dicen que el precio tiene que bajar aún un 24% más para que podamos comprárnoslas y los varapalos judiciales que están recibiendo los bancos, a mí me suena el tema más a cóctel molotov que a solución al problema, ¿no?