Así como hace meses se esperaba que los diferenciales cayeran hasta el 0,75% durante este año, porque la banca llevaba dos años en plena lucha por conseguir nuevos clientes, aunque fuera robándolos a la competencia, ahora la previsión es otra.
A juzgar por la competición que se traen algunas entidades para ver quién da el interés fijo más bajo, ahí es donde ahora la banca apunta su negocio, dejando a un lado las hipotecas a interés variable, que de siempre han sido las más utilizadas, tanto contratadas como ofertadas en España.
La situación ha cambiado porque se prevé un año más de Euríbor negativo y, cuando suba, tampoco lo hará bruscamente, así que la banca quiere asegurarse ganancias pase lo que pase.
Las hipotecas a interés variable no son rentables ahora mismo para los bancos. Por eso ponen un interés fijo durante el primer periodo, que suele ser de uno a dos años, y luego un diferencial que no baja del 0,90%, si bien estas hipotecas tienen una vinculación tan alta que al final resultan más caras que algunas a Euríbor + 1%, el mejor interés con poca vinculación que puedes conseguir ahora, salvo caso de que seas un cliente súper VIP y te regalen hasta la alfombra de la oficina.
Los diferenciales, por tanto, han tocado fondo y si te planteas una hipoteca a interés variable es inútil esperar a que mejoren las condiciones, porque todo apunta a que no lo harán. El precio de la vivienda ha tocado suelo también y todas las previsiones, tanto locales como regionales y nacionales, es que suba a partir de ahora, aunque de forma leve.
Los bancos han vuelto a dar crédito a los clientes, como atestiguan las estadísticas de hipotecas firmadas en los últimos meses. El despertar del sector en 2015 se están dejando notar en 2016 y, si piensas hipotecarte para comprar piso, éste es un buen momento. Luego la vivienda será algo más cara y la oferta variable no parece que vaya a mejorar. La fija sí, o sea que si es tu opción lo recomendable sí es esperar un poco en este caso, a ver si algún banco baja del 1,75%, que actualmente mantienen Sabadell y Bankinter.
Si aún no sabes si te interesa más una hipoteca fija o variable, pregúntate a cuántos años pondrás el préstamo. Si vas a estar más de 15-20 años te interesa un tipo fijo, porque lo que ahora pagues de más quedará compensado en años venideros cuando el Euríbor suba. Si, en cambio, vas a estar como mucho 15-20 años pagando, te saldrá más a cuenta la hipoteca variable porque pagarás menos intereses y podrás beneficiarte del Euríbor bajo, que aunque suba aún nos espera barato en los próximos años.