Por décimo mes consecutivo el Euríbor se ha despedido bajo cero. El indicador más utilizado para calcular la cuota de las hipotecas ha cerrado noviembre en el -0,074%, por debajo del -0,069% de octubre, con lo que además marca un nuevo mínimo histórico.
Es increíble ver que las palabras mínimo histórico, que debieran sonar a algo impresionante ya no impactan a nadie porque casi cada mes el Euríbor marca un nuevo récord a la baja. Con éste, las hipotecas sin suelo con revisión anual verán abaratada su cuota en 7 € al mes, que a lo largo del próximo año serán 84 € en total. Si la revisión es semestral el ahorro será de 3 € al mes, que serán 18 € en los próximos seis meses.
El Euríbor sigue bajando porque el Banco Central Europeo (BCE) continúa a tope con sus políticas para que los países de la zona euro salgan de la crisis y empiecen a crecer de nuevo. Compra deuda de las naciones que tienen el euro, presta dinero a los bancos sin intereses y les cobra un 0,4% si les dejan en depósito alguna cantidad.
Con esto el BCE pretende que los bancos se presten dinero entre sí, ya que aunque paguen por prestarse es menos que el 0,4% que les cobra el BCE. Por eso el Euríbor está en negativo, porque los bancos se prestan dinero unos a otros pagando por prestar en lugar de cobrarse intereses.
Como las medidas del BCE se prevé que sigan en pie al menos hasta abril de 2017, se espera que por lo menos hasta entonces el Euríbor siga ahondando en terreno negativo, con nuevas bajadas. Bajo cero quedará también, aunque quizá con alguna subida entre abril y julio, cuando se espera que por fin entre en funcionamiento la nueva forma de calcular el Euríbor, que todavía no ha entrado en vigor por temor a que una cifra positiva suba mucho las hipotecas de golpe.
Bankinter prevé que el Euríbor llegue a cero a mediados del próximo año y que lo termine entre el 0,1%, acabando en el 0,2% el siguiente año (2018), o sea subidas leves que por primera vez en tres años encarecerán las cuotas hipotecarias en vez de abaratarlas, pero que serán asumibles porque la repercusión será de pocos euros al mes.
Mientras el Euríbor no baje del -0,17% ningún banco se verá en la tesitura de pagar intereses al cliente por su hipoteca. El 0,17% es el diferencial mínimo que en España comercializó Deutsche Bank durante los años de bonanza económica. Aunque es difícil que esta situación se dé, la banca ya ha anunciado que no piensa descontar intereses del capital y que como mucho dejará la hipoteca en cero intereses y cobrará en la cuota sólo el capital pendiente que toque ese mes.