Archivo de la etiqueta: morosidad

La banca acepta la dación en pago a las inmobiliarias, pero no a las familias

El banco juega con dos barajas con tal de seguir siendo el rey de oros

El banco juega con dos barajas con tal de seguir siendo el rey de oros

Qué cierto es que la cuerda siempre se rompe por el extremo más flojo. Y qué puñeta es que ese extremo siempre sea del que (de)pendemos nosotros, ya sea como consumidores, hipotecados, ciudadanos… En definitiva, pringados de un sistema que no está montado para nosotros sino para beneficio de los que lo han montado, aunque nos intenten vender lo contrario.

Después de recopilar información de los bancos, porque les ha obligado a que se lo cuenten, el Banco de España dice que sus hijitos protegidos, las entiendades financieras, tienen 178.000 millones de euros que son muy difíciles de cobrar porque corresponden a hipotecas de gente o inmobiliarias que no están pagando o tienen pinta de que no van a pagar.

Estos millonacos suponen el 52% de todo el dinero que los bancos tienen prestado para la vivienda, pero allá se aguanten si no cobran porque con las ayudas del Estado, las fusiones y el encarecimiento de las hipotecas están saliendo del bache económico. Lo peor de todo es la ley del embudo que están aplicando a los que no pagan.

Me refiero a la tremenda injusticia que es que los bancos sí acepten la dación en pago a las promotoras inmobiliarias, pero no a los ciudadanos. La dación en pago es que tú le des al banco el piso y con eso canceles la deuda. No como ahora que le sigues debiendo dinero aun habiéndole dado la vivienda.

A las promotoras sí les está aceptando los pisos, pero a la mayoría de los hipotecados no, y eso que las inmobiliarias tienen una morosidad del 15,9% frente al 3,5% de las familias que no pagan la hipoteca. ¡Una quinta parte! Apenas algunos afortunados que consiguen negociar, algunos inmigrantes y otros que tienen sentencias judiciales a su favor lo consiguen.

Esta guarrería que están haciendo la ha denunciado en el Parlamento la coalición electoral ecologista de izquierdas Iniciativa per Catalunya Verds – Esquerra Unida i Alternativa, que se da a conocer con las siglas ICV-EUiA. Critican que los bancos apliquen un doble rasero y quieren que si hay dación en pago sea para todos y con carácter retroactivo.

El colmo es que los bancos juegan con dos barajas: reciben del Banco Central Europeo (BCE) 490.000 millones € para que se arregle la situación y luego no los hacen circular entre los que necesitan el crédito para sobrevivir y para reactivar la economía. Entre unas cosas y otras, ¡así no se puede arreglar nada! Así no se sale de la crisis.

Los bancos tienen chungo cobrar 132.000 millones € de hipotecas

A ver si este año me da tiempo a repartir los regalos antes de que me embarguen el trineo por no pagar todas las cuotas al banco

A ver si este año me da tiempo a repartir los regalos antes de que me embarguen el trineo por no pagar todas las cuotas al banco

Los bancos están cada vez más preocupados porque el riesgo de que no les paguemos la hipoteca aumenta

día tras día. Los excesos cometidos por todos durante la burbuja inmobiliaria se están pagando cada vez con más fuerza.

A día de hoy, según los numeritos que ha echado el Banco de España, de los más de mil millones que debemos a los bancos por las hipotecas, la cantidad de dinero que tienen difícil de cobrar suma ya 131.908 millones €. Es lo que llaman tasa de morosidad y en ella se incluyen a los que han dejado de pagar tres o más cuotas de la hipoteca.

Los bancos no tenían una cifra tan espeluznante de morosos desde noviembre de 1994, cuando el 9,15% de los deudores no pagaban. Después de haber aumentado un 1,75% en los últimos meses y de llevar cuatro meses subiendo sin parar, la morosidad estaba en octubre en el 7,41%.

Es menos que en el récord que se batió hace 17 años, pero mucho más importante porque en aquel entonces el dinero que chungo de cobrar sumaba casi 24.000 millones €, que es la quinta parte de los casi 132.000 millones € que los bancos tienen muy difícil recuperar ahora.

Lo peor y más significativo es que no creo que esta morosidad sea la peor que nos queda por ver. Nos van prestando menos dinero y vamos teniendo más difícil pagar, así que, al haber menos dinero prestado y más dificultades para devolverlo, cada vez hay mayor porcentaje de morosos sobre el total de la gente que sí devuelve el préstamo.

Las pequeñas y medianas empresas (pymes) siguen yendo mal y algunas cerrando o despidiendo a la gente. Mucha de esa gente tiene, además de otras obligaciones de pago y familia que mantener, una hipoteca alta para sus ingresos-por cómodo que esté ahora el Euríbor en el 2%-, o tiene cláusula suelo que impide beneficiarse de pagar menos ahora o, sobre todo, una hipoteca concedida durante la burbuja inmobiliaria por más del 80% del valor de un piso con precios inflados y que ya no vale lo que se está pagando por él.

Incluso algunas hipotecas se dieron por más del 100% del valor que en ese momento se dio a la vivienda, así que todo esto hace imposible devolver el dinero precrisis con los ingresos de la crisis.

Como los bancos no quieren acumular más morosos, porque ya les vale con acumular pisos sin vender, están empezando a negociar con la mitad de la gente que tiene muy difícil pagar. Como decía hace poco, lo tenían que haber hecho antes. Ahora no me vale que la banca llore porque la gente le deje de pagar (o la que le va a dejar de pagar en breve) y tenga que conformarse con comprar los pisos embargados a un 60% de su valor de tasación. Peor lo pasa la gente que no paga y pierde la casa.

A día de hoy, el 43% de las hipotecas son underwater, es decir, están constituidas por más dinero del que vale el piso ahora. Esto arruina a las familias y a los bancos que embargan. La gente pierde el piso, sigue debiendo pasta al banco y éste lo único que consigue es vender la casa en un plazo medio de 13 meses, si tiene suerte. ¡Ideal todo!

¡FELIZ NAVIDAD (A)MOROSA!

La banca cambia de estrategia frente a los que no pagan la hipoteca

La banca se viste de pingüino para reclamar la pasta a los que no pagan la hipoteca

Si no pagamos la hipoteca, la banca ha empezado a preferir negociar antes de achucharnos al cobrador del frac

Las familias debemos cada vez menos dinero a los bancos, según el Banco de España, y no es que de repente hayamos pagado todo o ya no necesitemos que nos presten.

Es que los bancos han dejado de prestarnos dinero y han tirado por la calle de en medio con los que no pagan, embargando muchos más pisos de los que ahora les hubiera gustado, pues estropean sus resultados financieros al no encontrar compradores y no poder transformarlos en dinero.

Aunque nuestra deuda hipotecaria es la más baja desde diciembre de 2007, los bancos se han gastado más de 9.000 millones € en perseguir a las más de 350.000 familias que durante los últimos cuatro años y medio (toda la crisis) no han pagado la hipoteca y al final han perdido su piso porque el banco se la ha ejucutado.

En vista de que a los bancos les estaba costando de media 22.000 € conseguir cada piso cuya hipoteca no se pagaba, y teniendo unas pérdidas de un 30% en cada proceso, han decidido cambiar de estrategia. En vez de ejecutar la mayoría de las hipotecas que no se pagan, los bancos están ejecutando solo el 30%, mientras que el 50% se negocia y el 20% restante termina llegando a algún acuerdo de otro tipo. Además, no persiguen tanto a los que han perdido el piso y siguen debiendo dinero.

Esto viene siendo una dación en pago encubierta, pues a fin de cuentas solo se entrega el piso para saldar la deuda. Lo malo es que, aunque el banco renuncie a perseguir lo que se le debe, coloca al moroso en una lista que luego no le permitirá ni alquilar un piso, porque cualquier casero puede rechazarlo por tener deudas y haber dejado de pagar anteriormente.

A pesar de todo lo que han hecho los bancos (ferias inmobiliarias, crear empresas filiales 100% destinadas a vender los pisos embargados, bajar los precios, chantajearnos para que compremos uno de sus pisos o si de lo contrario no nos dan la hipoteca, etc…), no consiguen transformar el ladrillo en dinero y por eso han empezado a buscar todo tipo de alternativas, incluso los bancos que al principio eran más duros.

Es lo que tenían que haber hecho desde un primer momento, pero la avaricia rompe el saco y pensaron que quedarse con los pisos por el 50% o el 60% de su valor en una subasta a la que no concurría no Peguisú, sería un buen negocio, más rápido y más limpio que negociar. El tiempo ha dado la razón a los hipotecados y las asociaciones de consumidores y se la ha quitado a los bancos.

Entre todos debemos a los bancos 875.557 millones €, de los que 668.847 millones € (tres cuartas partes del total) son de hipotecas y solo la cuarta parte (202.290 millones €) son de créditos para el consumo.

Hasta que se han decidido a hacer esto, mogollón de familias han perdido su casa y encima siguen debiendo dinero al banco, que difícilmente lo va a cobrar si la gente que ha perdido su casa la perdió porque no podía pagarla. Se calcula que al final de todo este proceso, serán 700.000 las familias que compraran durante el boom y lo hayan perdido todo.

Los bancos trafican con hipotecas a nuestras espaldas

Quiero tu casa, tu hipoteca y tu vida entera

Quiero tu casa, tu hipoteca y tu vida entera

No es una práctica nueva, pero sí arriesgada, que está otra vez de moda y que prefieren mantener oculta para que creamos que no tienen dinero y lo pasan fatal de la muerte.

Si tienes una hipoteca y no pagas, ten cuidado porque vete a saber qué banco acaba comprándola: a lo mejor ya no le debes el dinero al banco tiquití sino al banco tacatá, aunque eso no va a afectar mucho a la hora de que te ponga de patitas en la calle si no pagas.

En los últimos meses, a los bancos les ha dado por vender o comprar, según desde qué lado vean el negocio, paquetes de hipotecas morosas y de muy dudoso pago por nuestra parte con descuentos que llegan al 80%. Se compran en masa con la idea de ejecutarlas, embargar los pisos y después venderlos ganando un 50% respecto a lo que pagaron por ellos.

El negocio le sale redondo a todas las partes, menos a la nuestra. El banco que vende las hipotecas aligera lastre de cara a la foto financiera de fin de año, pareciendo que sus cuentas están más saneadas, aunque haya vendido duros a cuatro pesetas a otro banco.

El banco que compra ese paquete de hipotecas de dudoso cobro también hace un negocio redondo si su intención es acumular pisos para luego revenderlos más caros.

En nuestro caso, independientemente del banco que compre nuestra deuda, nos vamos a ver con que solo tenemos 6 meses para no pagar la hipoteca (antes eran 3) y con que, si al final la ejecutan, el banco sacará el piso a subasta y se lo adjudicará por un ridículo 60% de su valor. Ja, y antes era peor, hasta hace poco se lo podía quedar por el 50% e igualmente echarte en unos meses.

Algunos bancos se tiran el rollo y negocian el pago de la hipoteca con casi tanta flexibilidad como un palo de madera, otros permiten que te quedes pagándole un alquiler pero perdiendo la propiedad del piso, y la mayoría ejecuta la hipoteca, vende la casa y si te he visto, no macuerdo.

Lo que más fastidia es que hacen negocio hasta de nuestra desgracia y a nuestras espaldas. Estos packs de hipotecas morosas los compraban antes los fondos buitre, ¿te da alguna pista el nombre? En cambio, ahora se han lanzado a degüello los bancos, que se están convirtiendo en las grandes inmobiliarias del trapicheo en España, porque encima utilizan otras empresas que crean para esto. Es que los bancos se las saben todas.

¿Es buena idea reunificar las deudas en una nueva hipoteca?

Qué fácilmente daban dinero prestado y lo que está costando devolverlo

Qué fácilmente daban dinero prestado y lo que está costando devolverlo

Reunificar las deudas, es decir, juntar todo lo que debes de hipoteca, tarjetas de crédito, préstamos personales, etc.,  puede ser la solución a tus problemas o la soga que te ciñas al cuello para que las deudas terminen de ahogarte.

Parece que arrejuntando todo lo que debes en un solo préstamo vas a reducir los problemas, cuando en verdad se multiplican los intereses que pagas por ese dinero que te han prestado.

Reunificar las deudas es una buena idea si en un momento dado te vienen mal dadas porque, por ejemplo, te quedas sin trabajo, pero en el futuro tu situación económica va a cambiar porque, por ejemplo, vuelves a encontrar un empleo.

También es buena idea si consigues reunificar las deudas con el banco donde tienes la hipoteca: bien porque amplía el préstamo hipotecario que ya tienes para incluir lo que debes de la tarjeta de crédito o los préstamos personales que pediste para pagar la hipoteca; bien porque te da una segunda hipoteca que abarque las deudas que no son del piso; o bien porque cancele tu hipoteca actual y te dé una nueva que incluya la hipoteca anterior más lo que debes de tarjetas, préstamos personales, etc., teniendo en cuenta que esta opción resulta más cara.

En cambio, puede ser un auténtico suicidio financiero si recurres a alguna las entidades que estaban especializadas en reunificar las deudas, entidades que no son bancos ni cajas de ahorros, aunque estos pueden ser los dueños de dichas empresas.

Y digo estaban porque de las cuatro que había ya solo queda una a la que, con los vaivenes que está pegando la crisis, le sigan quedando ganas de prestar dinero a personas que desde el principio ya sabe que tienen problemas para devolver el dinero.

Para cubrir este grandísimo riesgo, a la hora de juntar las deudas en un solo préstamo, estas empresas ponían unas condicionas más duras que los bíceps de Stallone en sus buenos tiempos.

En vez de cobrarte intereses según el Euríbor + 1% o 1,5% (menos si contratas ciento y la madre de productos con el banco), Celeris (una de estas empresas que aceptaban reunificación de deudas hasta hace cuatro días) te cobraba Euríbor + 6,95%. Una pasada.

Y en vez de cobrarte entre el 0% y el 1% de comisión por abrir el crédito, te clavaban hasta un 3,95%. Otra pasada.

Al final, acababas pagando al mes el doble de lo que le pagabas al banco solo por la hipoteca del piso, así que aquí se ve que, en estos casos, no sale rentable pedir préstamos personales ni tirar de tarjetas de crédito para pagar el piso, ni mucho menos juntar todas las deudas en una sola, a no ser que quieras pagar el doble durante décadas.

Las cajas se apuntan a la dación en pago con matices

No es lo mismo dos tazas de té que dos tetazas

No es lo mismo dos tazas de té que dos tetazas

Esto sí que no me lo esperaba: las entidades financieras de parte de los consumidores, pidiendo algo que ellos también piden. ¿Dónde está el truco? ¿Qué ganan ellas a cambio?

Las cajas (no los bancos) le sugirieron a la comisión paripé del Congreso para estudiar reformas hipotecarias, que se cerró hace poco con la misma utilidad con la que se abrió, que debería usarse más la dación en pago, o sea, saldar la hipoteca con el banco entregándole el piso y no seguir debiéndole dinero como pasa ahora.

Para ello, la CECA (Confederación Española de Cajas de Ahorro), patronal de las cajas, dice que el Gobierno debería animar al personal eliminando los impuestos por Actos Jurídicos Documentados (AJC) cuando compramos un piso mediante hipoteca.

Este impuesto está actualmente transferido a las comunidades autónomas y significa que tenemos que pagar entre el 0,1% y el 1 % del dinero prestado, los intereses habituales, los que cobran por no pagar a tiempo (de demora), las costas judiciales y toda la pesca asociada al préstamo.

Nos sangran por todas partes, comprando pisos, con impuestos… Pero no creo que la Administración Pública dé su brazo a torcer en esto; antes dirá que las cajas reduzcan beneficios o hagan el Camino de Santiago a cuatro patas.

Las cajas defienden que la dación en pago se use más que ahora, que no se usa nada, pero no la que piden los hipotecados, las asociaciones de consumidores, los indignados del 15-M, Jueces para la Democracia, el ex presidente Felipe González y como nos descuidemos hasta Jesulín y Nelson Mandela. No.

Las cajas no quieren que se cambie la Ley Hipotecaria, como piden los otros, sino que se use tal cual aparece ya en el artículo 140, capítulo que te jodan pringao con la hipoteca.

Tampoco quieren que se use la dación en pago en exclusiva en todas las hipotecas y no otras fórmulas, sino que coexistan todas. Juas, tanta generosidad me abruma.

La excusa que ponen para imponer su dación en pago y no la nuestra es que aumentaría la morosidad del 2,5% al 8% y que habría menos hipotecas porque las entidades pondrían condiciones aún más duras que ahora.

Menos lobos, Caperucita. ¿Pero cuánto tiempo llevan intentando meternos el miedo en el cuerpo con esto? Ya he perdido hasta la cuenta, pero todavía no he visto que haya menos hipotecas por la dación en pago, entre otras cosas porque apenas se utiliza aunque esté en la Ley.

Si hay menos hipotecas es porque no las dan si no tienen 100% cristalino que les vas a devolver hasta el último céntimo del dinero prestado y de los intereses, siempre y cuando compres un piso de los que tiene sin vender, tengas más títulos que la Duquesa de Alba o seas más VIP que los concursantes de Supervivientes. Y a veces ni por esas.

Igual que tampoco creo que ni a las cajas ni a los bancos les interese que se den menos hipotecas de aquí a un tiempo, si aspiran a quitarse de encima los 300.000 pisos que se calcula que acabarán llevando a cuestas con tanto como han embargado por no pagar la hipoteca. Si es que en el pecado va la penitencia.

Porque las cajas siempre dan más hipotecas que los bancos y porque le están viendo las orejas del stock inmobiliario al lobo, las cajas se ponen tan fisnas a defender esta dación en pago light con matices.

Nos echan del piso mientras las inmobiliarias se van de rositas

Pinto, pinto, gargolito, si me embargan el piso, ya me puedo ir guareciendo bajo un puentecito...

Pinto, pinto, gargolito, si me echan del piso, ya me puedo ir guareciendo bajo un puentecito...

La crisis que se ha instalado en España con más virulencia que en otros países y que está echando más raíces que los acampados en la Puerta del Sol, nos trae el nuevo y triste récord histórico de 15.491 desahucios, que son 15.491 familias a las que echan de  casa por no pagar el alquiler o la hipoteca.

A pesar de que durante este mismo primer trimestre se han reducido por segunda vez consecutiva desde 2007 las hipotecas ejecutadas por no pagar al banco, los desalojos se disparan porque vienen de las hipotecas ejecutadas en 2009 y 2010. El año pasado ya hubo 93.000 embargos y para este año se espera una cifra aún mayor.

Antes, la gente se iba cuando le ejecutaban la hipoteca, ahora resisten como Numancia hasta que los echan del piso porque no tienen adónde ir, ni familiares que los acojan.

Como ya somos campeones del paro, ¿qué más da que lo seamos de desahucios? Total, no se va a notar… La gente que pierda la casa, que se vaya de acampada de indignados a la plaza del pueblo, y aquí peich y después glory.

Esta cantidad tan escalofriante de desahucios supone un 36,3% más que el año pasado, según el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que es el organismo que siempre calcula estas cifras, pues los desalojos pasan por los juzgados.

En Hispania no habrá más que desorden y desconcierto mientras que no se pongan soluciones que nos traigan cambios de ya para ya, y que duren a largo plazo. La dación en pago (cancelar hipoteca con el piso) es un buen ejemplo, pero los políticos no están por la labor de perjudicar a los bancos, aunque eso pudiera beneficiarnos.

Ésa es su excusa. Estoy harta de oír cómo si la dación en pago fuera una realidad, los bancos nos atizarían hipotecas todavía más caras. Ja-ja. ¡Pero si los pringaos somos los más fieles y a-morosos de sus clientes! Somos a los que más prestan y los que menos peligro tenemos de no pagar.

Los peores, los que no están pagando, a los que se fió dando hipotecas sin respaldos, los que están reventando el sistema son los promotores y constructores inmobiliarios.

Su morosidad es del 17,8% frente a un 2,6% de nuestras hipotecas. Es decir, son 7 veces más morosos y encima deben más dinero: 42.000 millones €, más 40.000 millones € que tienen pinta de seguir el mismo camino, frente a los 14.400 millones € que no pagamos los pringadillos.

En España nos esforzamos día a día para tener la selección nacional de campeones del desastre y todo apunta a que lo estamos consiguiendo. Pagamos las consecuencias los curritos de a pie, a los que más se nos culpa y más se nos castiga, sin ser necesariamente los más culpables.

¡Vámonos todos de acampada indignada! Ouuuu yeaaaaaaah.

Quien evita el impago de la hipoteca, evita el embargo

Un atrapado por la hipoteca intentando librarse del piso

Un atrapado por la hipoteca intentando pagarla o librarse del piso

Un tercio de los embargos podría evitarse. ¿A qué están esperando para hacerlo? ¿A seguir batiendo récords? Con una media cercana a los 100.000 embargos al año desde que empezó la crisis en 2007, las familias ya no sabemos qué hacer para pagar la hipoteca, llegar a fin de mes, encontrar trabajo, mantenerlo y seguir adelante.

En España, 901.300 familias no pueden pagar la hipoteca; 344.500 no pagan los recibos, y 322.700 tienen problemas para pagar los cargos de la tarjeta de crédito. En total, el Instituto Nacional de Estadísitca (INE), calcula que en España hay 1,24 de hogares morosos.

Si multiplicamos por dos, tres o cuatro personas que puede tener un hogar, imagínate a cuánta gente con cara, ojos y sentimientos, afectan estas cifras que en números pueden parecer frías, pero que calientan la cabeza de quienes viven esta realidad.

Lo paradójico, según el INE, es que en el 60% de las familias morosas todos trabajan mientras que solo el 10% tienen a todos en paro.

Habrá gente que haya llevado un tren de vida por encima de sus posibilidades, y habrá quien, a pesar de trabajar, no gane lo suficiente para cubrir sus necesidades y las de los suyos. Esto sí que es preocupante y nos hace una radiografía de la miseria que está reproduciéndose en España.

También es preocupante que ahora se descuelgue la Agencia Negociadora de Productos Bancarios (ANPB), diciendo que un tercio de los embargos podría evitarse. Algún interés tendrá en afirmarlo, además de la noble tarea de remarcar lo mal que nos van las cosas y lo mejor que podrían irnos con otros aires.

La solución que proponen es la reunificación de deudas, que a mí tampoco me parece la panacea, porque muchas veces echas los cálculos y, al final, reagrupadas las deudas acabas pagando más dinero.

Más dinero es el que sí están pagando por su piso los que se lo han comprado este año, una vez colgado el cartel de R.I.P. en la desaparecida deducción fiscal por compra de vivienda habitual. Pues no van a echar de menos ni desgravarse la hipoteca en Hacienda al año que viene…

Y eso que el Gobierno quitó la deducción para los que ganan más de 24.000 € al año y la reguló para las inferiores, con la excusa de animarnos a comprar más viviendas y que estuviéramos mejor. ¿Pero con qué dinero de qué sueldos de qué trabajos? ¿Con qué hipotecas de qué bancos?

Hemos salido perdiendo. El dinero que tenemos para gastar ha bajado un 5% y, según el Banco de España, desde que la deducción ha muerto tenemos, además, que utilizar un 6,5% más de nuestros ingresos. Antes gastábamos en el piso una media del 27,3% y ahora estamos en el 33,8%, por encima de lo recomendable.

Que se dejen de milongas: la mejor ayuda social es dar trabajo. Y de ahí para adelante.

De fuera vendrán que bueno te harán

La Unión Europea despliega sus alas para protegernos del mercado hipotecario que nos acecha actualmente

La Unión Europea despliega sus alas para protegernos del mercado hipotecario que nos acecha actualmente

Ya que en España aún no se han puesto serios ni efectivos para acabar con los impagos y los embargos, que vienen de dar hipotecas sin ton ni son, demos gracias a la Unión Europea por proponer una normativa común para todos los países de este club.

La UE quiere terminar con las hipotecas que se dieron irresponsablemente antes de la crisis y que provocaron la burbuja inmobilaria.

Por eso, quiere que los bancos nos estudien mejor antes de prestarnos dinero; que nos informen bien acerca de los riesgos de contratar una hipoteca; que no nos invadan con publicidad engañosa; y que se reduzcan los impagos y los embargos, terminando con la dramática situación de que tantas familias pierdan su casa.

España es uno de los países con más morosidad dentro de la UE, morosidad que ha aumentado un 260% en lo que va de crisis. Para conseguir más transparencia, protección al consumidor, información y facilidad de acceso a los créditos hipotecarios, la UE propone que los bancos operen en igualdad de condiciones en cualquier país de la Unión, homogeneizando la información que recibimos de ellos.

Para conseguirlo, proponen una “hoja europea de información normalizada”, en la que claramente los bancos explicaran todas las condiciones de la hipoteca y que nos permitiría comparar fácilmente lo que nos ofrecen unos y otros.

Según la UE, los bancos y los intermediarios provocaron la situación actual y no los consumidores, como nos acusan ellos, y los impagos se reducirían hasta en 1.931 millones de euros.

La propuesta será estudiada por el Parlamento Europeo y el Consejo de Ministros. Si nos beneficia en algo como consumidores y va a contribuir a terminar con la Casa de Tócame Roque que es el sistema hipotecario español, bienvenida sea.

Esto se podría haber hecho antes, pero en las hipotecas pasa como en todo: que no se hace nada por cambiar la situación hasta que no ha pasado una desgracia. Como cuando ponen un paso de peatones en un cruce peligroso después de que hayan atropellado a alguien, y nunca antes aunque te hayas desgañitado denunciándolo.

Los problemas para esta norma que veo en España son un endurecimiento de las condiciones por parte de los bancos, que incluso se niegan a dar préstamos a gente solvente; la excesiva cantidad de pisos que embargaron y ahora les cuesta vender; la sobrevaloración de los pisos en un 40% frente a la caída en un 30% de los sueldos que padecemos; y el poco interés que mostramos por informarnos bien de lo que firmarmos, y el aún menor interés de los bancos por informarnos de esto mismo.

El boom de las hipotecas basura en España

Por mucho que lo llamen arte, sigo estando hecho de basura

Por mucho que lo llamen arte, sigue estando hecho de basura

Sabiendo que algo huele mal en los bancos desde el principio de la crisis, ya era hora de que supiéramos dónde está la parte más podrida del negocio hipotecario, esas hipotecas que se dieron con mucha alegría y que se están ejecutando con demasiada pena: sueños convertidos en pesadilla que se fraguaron durante el boom y que han estallado en un enorme buuuum cuyos pedazos seguimos recogiendo.

Las que en otros países se llaman hipotecas subprime o hipotecas basura, por el alto riesgo de impago que conllevan, en España suman 100.000 millones de euros.

Son la quinta parte de las  hipotecas que tenemos contraídas y que principalmente corresponden a jóvenes con contratos temporal e inmigrantes, que han dejado de pagar por falta de recursos. Hablamos de una morosidad del 6%, que es una barbaridad.

¿De quién es la culpa? En parte de quienes pidieron por encima de sus posibilidades y, en parte mayor aún, de los bancos que dieron alegremente un dinero a quienes no estaba claro que pudieran devolverlo.

La ambición les perdió, pues pensaron que si no pagaban ya se quedarían con sus pisos, sin calcular que los ladrillos pesarían más que una vaca en brazos. El Banco de España les advirtió, pero con tanta timidez que hasta Winnie the Pooh parece un macarra.

Las cajas prestaron más descuidadamente que los bancos, aunque ambos son culpables de dar un dinero que ni Paco Lobatón sabe dónde está.

Se prestaron en hipotecas para el 100% del valor de tasación del piso y en ocasiones mucho más. Tanto que hasta el banco te incitaba a que te compraras la casa y fueras más allá: las vacaciones, el barco, los muebles… No importaba el qué, te daban el dinero y ya te apañarías para devolverlo. ¡Carpe Diem!

Estos excesos de la pasada década explican por qué los bancos se están hinchando a embargar pisos que ya no saben dónde meter y que no hacen más que depreciarse, y por qué los particulares se quedan sin casa y encima siguen arrastrando una deuda per secula seculorum.

Por esta situación tan irresponsable, ahora los bancos ya no prestan ni a quienes de verdad podrían devolver el dinero y las poquísimas hipotecas que dan son para sus pisos y con condiciones cada vez más duras.

Todos deberíamos aprender de este grandísimo error que nos ha llevado a la ruina y que nos ha hecho pasar de una opulencia basada en la imaginación a una pobreza más real que la vida misma.