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Amortizar hipoteca: lo más rentable para invertir los ahorros

Amortizar hipoteca como forma de ahorrar

Una forma inteligente de ahorrar dinero

Los tipos de interés en el 0% y el Euríbor en negativo (cerró agosto en el -0,048%) hacen que amortizar hipoteca sea lo más rentable para las familias que compran a crédito su casa.

Antes, cuando había depósitos a altos tipos de interés, cuando la Bolsa vivió buenos momentos o cuando había productos que te daban bastante dinero por meter los ahorros, las familias no se planteaban tanto amortizar hipoteca como ahora.

Y eso que existía la desgravación, que puede dar a cada unidad familiar hasta 1.356 € en cada campaña de la Renta (hasta el 15% de 9.040 €) o el doble si los titulares de la hipoteca presentan Declaración individual en vez de conjunta.

Este chollo fiscal, que deberían recuperar para incentivar la compra de vivienda y aliviar a las familias de cara a futuras subidas de la hipoteca, ya no existe para quienes hayan comprado piso desde enero de 2013. Sin embargo aún quedan bastantes préstamos que sí se pueden desgravar, lo que supone un aliciente más a la amortización.

Amortizar ahora mismo hipoteca supone un gran ahorro y una gran inversión. Ningún otro producto produce ahora esta rentabilidad. Además de ganar dinero con la desgravación fiscal, si se tiene, se reducen los intereses totales a pagar, siempre que se amortice en plazo.

Lo ideal es esto, excepto que no se pueda asumir la cuota mensual, caso en el que lo más prudente es reducir cuota, aunque eso suponga pagar más intereses. Más atractivo todavía es amortizar si no se tiene comisión.

Hasta ahora es un máximo del 0,50% los cinco primeros años y un 0,25% el resto del tiempo, si bien hay préstamos con el 1% -algo típico en los años del boom- y otros que no tienen. Estas comisiones van a abaratarse en cuanto España forme Gobierno e incorpore una directiva europea que reduce la comisión por amortización anticipada. Amortizar reduce la media de pago de la hipoteca. Si hace un par de años se tardaban 21 años de media en pagar el préstamo, la cifra a bajado a 13 años.

El dinero que se debe a los bancos se ha reducido a la mitad en lo que llevamos de crisis. Mientras que en 2008 las familias debían por su casa alrededor de 1,2 billones de euros, la cifra ha bajado a principios de este año a 521.000 millones, según el Banco de España.

Son 25.000 millones menos que un año antes, fenómeno que se explica por varias cosass. Una es que se firman menos hipotecas que antes, lo que hace que las que hay vayan poco a poco pagando el dinero pendiente. Otra es que las hipotecas más antiguas ya pagaron más intereses al principio y, a medida que avanza el tiempo, pagan más capital y por tanto reducen su deuda.

Pero además amortizan. La firma de hipotecas por fin se recupera. Lleva más de dos años seguidos subiendo así que, aunque no compensa del todo las hipotecas que se terminan de pagar, sí que aumenta el saldo que debemos en conjunto a los bancos. Casi la mitad de los hogares han terminado de pagar su hipoteca, cifra que aumenta entre los mayores de 50 años.

Necesito poco dinero: ¿pido hipoteca o préstamo personal?

Hay que hilar muy fino

Hay que hilar muy fino

Si necesitas poco dinero para comprar una casa debes valorar dos opciones: pedir una hipoteca o un préstamo personal. Ambas tienen ventajas y desventajas según sea tu caso.

Aunque no todos, la mayoría de bancos tiene un límite mínimo de dinero que prestan para vivienda: unos 30.000 €, otros 50.000 € … El motivo es que el dinero de las hipotecas lo venden más barato que el de otros préstamos y para que les compense quieren asegurarse un mínimo de capital prestado, para ganar intereses a su costa durante años.

Ganan más prestando más, así que prefieren dar hipotecas de 150.000 € antes que una de 50.000 €, contra lo que pudiera parecer, puesto que el riesgo para un banco es menor si presta 50.000 € que si deja 150.000 €.

Entonces, si por ejemplo necesitas 20.000 – 25.000 € puedes recurrir a un préstamo personal. La ventaja es que no tendrás que firmar vinculación (seguros, tarjeta, ingresos, plan de pensiones, etc.).

Tampoco necesitarás inscribir la hipoteca en el registro de la propiedad, ni tendrás gastos de apertura (en caso de que el banco cobre comisión por ello, que suele ser del 1%), amortización o cancelación. Tampoco deberás pagar el notario por la firma de la hipoteca y ahorrarás la gestoría que realice los trámites.

Tampoco tendrás la incertidumbre de qué pasará con tu cuota, ya que no dependerá del Euríbor, ni del IRPH, ni de ningún otro indicador, será fija. También puedes pedir una hipoteca a interés fijo, que ahora están en el 1,40% – 1,60% las más baratas, pero te saldrá una cuota más cara que una hipoteca variable.

Te interesa una cuota u otra dependiendo del dinero que necesitas, de cuáles son tus ingresos, de qué cuota te puedes permitir al mes, cuánto tienes ahorrado y si ya tienes otros préstamos (estudios, coche, muebles, etcétera).

Lo malo de pedir un préstamo personal es que el interés será mucho más alto. Frente al que hemos comentado de la hipoteca fija o al Euríbor + 1% de una hipoteca variable, el préstamo personal fácilmente se te puede subir al 7% de interés, con una cuota mucho más alta que la de una hipoteca. En España han subido estos intereses para compensar el Euríbor en terreno negativo desde hace 7 meses. Es el tercer país más caro de la Unión Europea para pedir un crédito al consumo.

Los bancos no se arriesgan a prestarte si todas tus deudas te van a suponer más de un tercio de tus ingresos al mes. Que no tienes otras deudas, bien… Tienes terreno para endeudarte. Pero si ya tienes otros préstamos abiertos es posible que te lo denieguen, según tus gastos e ingresos. La solución es poner un cotitular que no tenga deudas, pedir más dinero para llegar al mínimo de una hipoteca o esperar a terminar de pagar las deudas.

Los diferenciales han tocado fondo y no habrá mejores ofertas

Difícil bajar más las condiciones

Difícil bajar más las condiciones

Así como hace meses se esperaba que los diferenciales cayeran hasta el 0,75% durante este año, porque la banca llevaba dos años en plena lucha por conseguir nuevos clientes, aunque fuera robándolos a la competencia, ahora la previsión es otra.

A juzgar por la competición que se traen algunas entidades para ver quién da el interés fijo más bajo, ahí es donde ahora la banca apunta su negocio, dejando a un lado las hipotecas a interés variable, que de siempre han sido las más utilizadas, tanto contratadas como ofertadas en España.

La situación ha cambiado porque se prevé un año más de Euríbor negativo y, cuando suba, tampoco lo hará bruscamente, así que la banca quiere asegurarse ganancias pase lo que pase.

Las hipotecas a interés variable no son rentables ahora mismo para los bancos. Por eso ponen un interés fijo durante el primer periodo, que suele ser de uno a dos años, y luego un diferencial que no baja del 0,90%, si bien estas hipotecas tienen una vinculación tan alta que al final resultan más caras que algunas a Euríbor + 1%, el mejor interés con poca vinculación que puedes conseguir ahora, salvo caso de que seas un cliente súper VIP y te regalen hasta la alfombra de la oficina.

Los diferenciales, por tanto, han tocado fondo y si te planteas una hipoteca a interés variable es inútil esperar a que mejoren las condiciones, porque todo apunta a que no lo harán. El precio de la vivienda ha tocado suelo también y todas las previsiones, tanto locales como regionales y nacionales, es que suba a partir de ahora, aunque de forma leve.

Los bancos han vuelto a dar crédito a los clientes, como atestiguan las estadísticas de hipotecas firmadas en los últimos meses. El despertar del sector en 2015 se están dejando notar en 2016 y, si piensas hipotecarte para comprar piso, éste es un buen momento. Luego la vivienda será algo más cara y la oferta variable no parece que vaya a mejorar. La fija sí, o sea que si es tu opción lo recomendable sí es esperar un poco en este caso, a ver si algún banco baja del 1,75%, que actualmente mantienen Sabadell y Bankinter.

Si aún no sabes si te interesa más una hipoteca fija o variable, pregúntate a cuántos años pondrás el préstamo. Si vas a estar más de 15-20 años te interesa un tipo fijo, porque lo que ahora pagues de más quedará compensado en años venideros cuando el Euríbor suba. Si, en cambio, vas a estar como mucho 15-20 años pagando, te saldrá más a cuenta la hipoteca variable porque pagarás menos intereses y podrás beneficiarte del Euríbor bajo, que aunque suba aún nos espera barato en los próximos años.

Nuevos impuestos por cambiar las condiciones en la hipoteca

Es mejor no andar tocando lo que no suena...

Es mejor no andar tocando lo que no suena…

Hacienda siempre anda buscando de dónde rascar dinero, y ahora se lanza a las hipotecas. Pero, tranquilos, no a todas, solamente a las que cambien sus condiciones, o sea a los clientes que realicen lo que se llama una novación hipotecaria.

Hasta ahora no había que rendir cuentas con la Agencia Tributaria si se firmaba un nuevo contrato de la misma hipoteca porque se modificaran alguna de sus condiciones, ya fuera el plazo, añadir un periodo de carencia, cambiar la divisa, modificar el tipo de interés, ampliar el importe, etcétera.

Sin embargo, desde ahora la Agencia Tributaria quiere cobrar un Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (IAJD) a los hipotecados que varíen en su hipoteca el valor de tasación del piso, si se cambia el sistema de amortización o se amplía el periodo de carencia (tiempo que puedes estar sin pagar hipoteca o pagando solamente intereses).

Todo viene de una consulta que se hizo en 2014 a la Dirección General de Tributos. Si es que es mejor no menear ciertas cosas, que luego uno anda tocando lo que no suena y, al final, cuanto más se remueve el tema peor huele.

A raíz de aquello, la Agencia Tributaria ha decidido cobrar por todos los motivos que propicien un cambio de hipoteca excepto en dos: el plazo y el tipo de interés.

El Impuesto de Actos Jurídicos Documentados ya se paga cuando firmas la hipoteca por primera vez. Por eso hay varios bufetes de abogados que no comprenden por qué Hacienda reclama otra vez este impuesto si, básicamente, se trata de la misma hipoteca, con apenas unos cambios. Vamos, que no se cambia el titular ni nada parecido, que es lo que sí podría dar origen o sentido al nuevo cobro de este impuesto. El caso es cobrar, grrrrrrr.

Para dar una respuesta no hace falta ser una lumbrera: porque Hacienda siempre está buscando de dónde sacar dinero, y ha visto una oportunidad perfecta en este terreno. Lo raro es que un día no nos lleguen a cobrar un impuesto por morirnos, que nos lo vayan a cobrar al cementerio y que, si no pagamos, nos coloquen en la lista de morosos del Más Allá y nos persigan desde el Más Acá para pagarlo.

La edad cuenta para pedir una hipoteca

Las edades de la hipoteca

Las edades del homo hipotecus

A la hora de pedir una hipoteca no todo es tener ahorros, un trabajo estable y un contrato indefinido. La edad también cuenta y no es lo mismo pedir una hipoteca con 25 años, con 35 o con 45.

Los bancos tienen en cuenta la edad para alargar el plazo de devolución del dinero más o menos en función de los años que tengas cuando lo pides y cuando termines de pagar.

Si pides una hipoteca con 35 años no te dejarán más de 30 años para pagar. En cambio, si lo haces con 25 años te dejarán hasta 40, si la oferta del banco contempla prolongar tanto el plazo.

Además de conseguir un plazo de amortización muy largo (de hasta 40 años), la ventaja de pedir una hipoteca con menos de 35 años es que te puedes acoger a la Hipoteca Joven, aunque apenas quedan dos o tres repartidas por toda la geografía española. Ay, qué pena… Antes no había casi entidad, ciudad o comunidad autónoma que no tuviera una.

Las condiciones eran más ventajosas que para otros préstamos, ya que se tenía en cuenta que a tan corta edad no ha dado tiempo a consolidarse en el trabajo, tener altos ingresos, ahorros para la entrada y los gastos de compraventa, y por tanto se llegaba a prestar hasta el 100%, con menos intereses y sin comisiones. En los tiempos que corren los jóvenes son los que tienen más difícil acceder al mercado hipotecario, por eso muchos están optando por el alquiler o por seguir con sus padres.

La edad ideal para pedir una hipoteca es entre los 35 y los 45 años. Teóricamente ya has alcanzado mejor posición en el mercado laboral, tienes más antigüedad en la empresa o el sector, mucha gente está emparejada (asumir el gasto entre dos es más llevadero) y ha dado tiempo a tener ahorros, aunque en estos tiempos cada vez es más difícil cumplir este perfil.

Es la edad preferida por los bancos, porque no eres ni muy joven para no tener trabajo o posición socioeconómica, ni muy mayor para terminar de pagar el préstamo. El banco te verá con buenos ojos si no has cambiado mucho de trabajo y tienes dinero ahorrado. El plazo para devolver el dinero puede ser corto o largo, según tu perfil.

Con más de 45 años el plazo no puede llegar ni a 30 ni a 40 años porque la mayoría de los bancos no aceptan que tengas más de 70 cuando termines de pagar. Esto sube el importe de las cuotas, que sólo te puedes permitir si no representan más del 30% de tus ingresos. Lo bueno es que a esta edad se supone que te ha dado más tiempo a ahorrar y a tener mejor posición económica y laboral, aunque aquí en estos tiempos ya no hay nada asegurado.

Cómo bajar la cuota de la hipoteca

A veces requiere esfuerzo

Nadie dijo que fuera fácil

Tu situación ha cambiado, la cuota de la hipoteca te apura la economía en casa y quieres bajarla para ir menos asfixiados, más relajados o simplemente para poder pagarla. ¿De qué manera se puede reducir para que sea más asequible?

Una forma es amortizar hipoteca en cuota, para que ese dinero que pagas por adelantado te reduzca la cuota mensual en cierta cantidad de euros, según el dinero que amortices.

Esto es válido si tienes ahorros o te cae algún dinero de golpe, como por ejemplo una indemnización por despido, que te pondrá las cosas más fáciles mientras estés en el paro.

Otra forma es utilizar el periodo de carencia, si es que tu hipoteca y tu banco lo contemplan. Consiste en pagar durante cierto tiempo sólo los intereses, sin nada del capital pendiente.

Si la cosa te va fatal y el banco te lo permite, en vez de aplazar el pago del capital puedes aplazar el pago de la cuota entera durante el tiempo que te venga bien y/o te permita el banco.

Otra manera de rebajar la cuota es alargar el plazo de la hipoteca. Es decir que en vez de devolver el dinero en 25 años, amplíes el tiempo a 30 ó 40 años. Esto, como lo anterior, tienes que hablarlo con la entidad y cruzar los dedos para que lo acepte. Que te diga que sí dependerá de si has pagado puntualmente, no tienes otras deudas, sigues teniendo ingresos, etcétera. En todos los casos, la desventaja es que al final habrás pagado más intereses.

Si esto no cuela puedes pedir que te baje el tipo de interés. Quizá tengas uno más alto y la amenaza de irte a otra entidad le lance a hacerte una contraoferta que satisfaga tus necesidades y se ajuste a tus posibilidades de pago. Si se niega, puedes llevarte la hipoteca a otra entidad (subrogación), que quizá te reciba con los brazos abiertos porque necesita clientes, aunque si detecta que es porque tienes problemas de pago quizá no sea tan receptiva.

Ten en cuenta que algunos bancos cobran comisión por todas o alguna de estas operaciones y que cambiar las condiciones de la hipoteca se llama novación y requiere firmar un nuevo contrato ante notario, con gasto incluido. Debes estudiar si te compensa a cambio de rebajar la cuota o si tu economía te permite hacerte cargo de este gasto extra, por mucho que ello suponga a la larga un ahorro en la hipoteca.

¿Son mejores ahora las hipotecas que durante el boom inmobiliario?

Buscando en el baúl de los recuerdos, uhhhh

Buscando en el baúl de los recuerdos, uhhhh

Las hipotecas han cambiado de unos años a esta parte. Cuando la firma de préstamos estuvo a tope las condiciones eran diferentes a las actuales. El Euríbor, la economía y los sueldos andaban más altos. Eso hizo que el diferencial fuera más bajo y que el 0,50% fuera fácil de ver, porque todo lo más llegaba al 1%. Euríbor +1,5% sonaba a locura.

La cosa estuvo así hasta 2010 aproximadamente, si bien la burbuja inmobiliaria había estallado en 2007, notándose un descenso en las hipotecas a partir de 2008. Entonces se vivió un periodo de sequía, de pedir dinero a los bancos y no recibirlo y de ver diferenciales por encima del 3%.

Ahora que han bajado y ya van por el 1,25% los más competitivos, ¿son mejores las hipotecas de ahora que las del boom inmobiliario? Por ejemplo se paga menos cuota. Con Euríbor + 1,25% el interés a pagar sería 1,41%. Con Euríbor + 0,50% en 2010 el interés era 1,80%, porque el Euríbor medio de ese año fue de 1,30% y ahora es 0,161%.

Visto así ahora son más baratas las hipotecas, pero no hay que olvidar que la mayoría de entidades ponen un interés fijo el primer año, precisamente para ganar más dinero ya que el Euríbor está tan bajo. Además, este indicador subirá y cuando lo haga, se pagará más cuota porque los diferenciales de ahora son más altos. Lo comido por lo servido.

En cuanto a la vinculación, esos productos que el banco incita a comprar para rebajar el diferencial (seguros, tarjetas, planes de pensiones, etc.), se nota que ha aumentado. Si antes de la crisis apenas se pedían seguros de hogar y vida, ahora se añaden muchas más cosas. Sólo algunos como ING o Bankinter mantienen una vinculación escasa.

Antes se cobraban comisiones y ahora también, aunque cada vez son más frecuentes para contrarrestrar que la cláusula suelo es una especie en peligro de extinción. Apenas se usa en nuevas hipotecas, pero en 2010 y antes sí que era frecuente y eso ha hecho que cuando el Euríbor ha bajado, los bancos hayan mantenido las cuotas en un mínimo que algunos no han podido asumir y otros lo hacen a duras penas.

En plazo y financiación hemos salido ganando, aunque no lo parezca. Si antes era normal dar hipotecas a 40 – 50 años porque los pisos eran muy caros y el plazo se alargaba para tener cuotas menos altas, ahora raramente se pasa de 30 años. Tampoco se pasa del 80% del valor del piso, mientras que antes se veían casos del 100% e incluso 110%, porque ahí se metían los gastos de compraventa del piso, el coche o las vacaciones familiares, lo que incrementó muchísimo la deuda.

En resumen, ahora se dan hipotecas más prudentes pero se pide un perfil más alto que no cumple todo el mundo porque la economía doméstica se ha empobrecido de forma general. ¿Eran mejores antes las hipotecas? Eran de otra época y para otra época. Tenían cosas mejores y cosas peores. Las de ahora son muy mejorables, pero no están mal para la situación de crisis de la que venimos y por descontado que van a mejorar porque los bancos necesitan clientes que paguen, así que si no tienes prisa espera las nuevas ofertas o la rebaja de las actuales. Llegará pronto.

¿Cuántos años crees que tardarás en pagar la hipoteca?

La hipoteca es una carrera de fondo

Pagar la hipoteca es una carrera de fondo

Cualquiera con hipoteca ha soñado con el mágico momento de terminar de pagarla. ¿Quién no fantasea alguna vez con cómo será su vida cuando no tenga un gasto fijo de 400 €, 700 € ó 1.000 € al mes? ¡Cuántas cosas se podrán hacer con ese dinero…! Vivir más desahogados, tener otras vacaciones, ahorrar…

Algunos hasta son ahorradores y optimistas con respecto al pago de su hipoteca, ya que casi la mitad piensa que podrá liquidar su préstamo antes de que termine el plazo, que suele ser de 20, 30 ó 40 años.

Es lo que dice una encuesta de la web pisos.com, en la que el 28% de los preguntados tiene pensando agotar el plazo y el 26% duda sobre si pagará hasta el final o acabará antes.

La clave para terminar antes es amortizar anticipadamente, en plazo o en cuota según te convenga. Amortizar en plazo significa quitarle años o meses de vida a la hipoteca. Por ejemplo, te quedan 20 años, amortizas 5.000 € y de repente tu hipoteca baja año y medio.

Es lo más recomendable si puedes asumir la cuota mensual, porque además de bajar el tiempo de pago, rebajas los intereses, que sobre todo son altos en los primeros años, pues la mayoría tiene un sistema de amortización francés que hace que al principio en la cuota mensual pagues más intereses que capital.

Amortizar en cuota es recomendable si tienes problemas para pagar la hipoteca mensual. Haciéndolo así consigues rebajar unos euros tu mensualidad, más o menos dependiendo de cuánto dinero amortices. Ante la duda, aquí tienes unos simuladores de hipotecas para hacer cálculos. No olvides tener en cuenta si el banco te cobra comisión por amortizar anticipadamente la hipoteca, lo que suele ser entre el 0,25% y el 0,5%.

Cuando el Euríbor está bajo, como ahora, y quieres sacarle el máximo partido a la pasta que has logrado juntar, lo mejor es amortizar en plazo. Con los intereses tan bajos los depósitos no te dan tanta rentabilidad como pagar el préstamo y encima Hacienda te retiene el 21% de los intereses que te abone el banco.

Y ya no digamos si firmaste el crédito antes de 2013 y te lo puedes desgravar en la Declaración de la Renta. Entonces hasta te pueden salir los intereses de la hipoteca gratis, porque Hacienda te devuelva lo mismo o más que has pagado el año anterior en intereses.

Cuánto dinero te hayan dejado influye bastante a la hora de devolverlo. Según este estudio, más de la mitad de las hipotecas tiene un plazo de amortización de entre 20 y 30 años, a la mitad les prestaron entre el 80% y el 100% de lo que valía la casa, y algo menos de la mitad recibió menos del 80%.

Bankinter ataca el mercado de hipotecas a interés fijo con un 2,05%

Ha vuelto a dejar en bragas a sus competidores

Ha vuelto a dejar en bragas a sus competidores

Bankinter acaba de lanzar una hipoteca a interés fijo del 2,05%. Toda una oferta rompedora teniendo en cuenta la trayectoria de este tipo de préstamos en España, habitualmente por encima del 5% de interés, y la oferta actual, del 2,5% en adelante.

Como es habitual en las hipotecas a interés fijo el plazo de amortización de Bankinter (10 años) es menor que en las de interés variable (30 años).

Para mantener el interés del 2,05% exige la contratación de seguros de hogar y vida y domiciliación de nómina y tres recibos. No es mucho si se tiene en cuenta lo que suelen pedir otros bancos. De no hacerlo, el interés sube, igual que ocurre si se amplía el plazo. A 15 años el interés es 2,40% y a 20 años es 2,75%.

La hipoteca financia hasta el 80% del valor del piso si se va a usar como vivienda habitual y hasta el 55% como segunda residencia. A diferencia de lo que hace en su hipoteca a interés variable, ésta sí tiene comisiones: 1% por abrir el préstamo, 0,5% por cancelar, amortizar o subrogar (cambiarlo de banco) durante los 5 primeros años, y del 0,25% en los mismos casos a partir del quinto año.

Bankinter se ha tomado en serio la competición por captar clientes solventes. Fue el primero en romper el hielo en octubre de 2013, bajando el diferencial de su hipoteca (Euríbor + 1,95%) por debajo de la barrera mental del 2%.

Además de ser pionero en abrir el grifo del crédito cuando todo el mundo lo tenía muy cerrado o con unas condiciones imposibles, ha ido rebajando su diferencial hasta Euríbor + 1,50%, que si bien ahora se queda un poco alto para las ofertas más competitivas que ya vamos viendo a Euríbor 1,30%, es la única entidad que ofrece su hipoteca con dación en pago. O sea que si al final dejas de pagar, entregas las llaves al banco y listo, no hay subasta de tu casa por un precio irrisorio ni arrastras deuda pendiente.

Seguro que su próximo paso es bajar este diferencial. Pero por el momento ha atacado el mercado del interés fijo, que tras años más parado que un gato de escayola y con intereses por las nubes, se ha reactivado con la bajada del Euríbor y la competición por cazar buenos pagadores. Quieren compensar que con el Euríbor por los suelos se pagan cuotas bajas en las hipotecas a interés variable y que ha caído el número de préstamos porque se conceden menos y los viejos se van terminando de pagar sin prisa pero sin pausa.

Mejores hipotecas a tipo fijo

El tipo fijo ha pasado de gusano a mariposa en cero coma

El tipo fijo ha pasado de gusano a mariposa

Las hipotecas a tipo fijo, que nunca han parecido atractivas en España en comparación con la oferta a tipo variable, están empezando a resultar competitivas.

Es que, al igual que las de tipo variable han bajado mucho sus diferenciales en el último año y medio, las de tipo fijo también han recortado sus intereses, hasta tal punto que hasta te hace plantearte si lo mejor ahora mismo es una de estas hipotecas.

Teniendo en cuenta que tardamos en pagar un préstamo hipotecario una media de 21 años, según el Instituto Nacional de Estadística (INE) y que en ese tiempo puede pasar de todo con el Euríbor, y sabiendo que los diferenciales han bajado pero no tanto como para estar la mayoría por debajo del 1% (aún), una hipoteca a tipo fijo del 2,5% se ha vuelto interesante.

Cuando el Euríbor suba, que lo hará en los próximos años, puede dejar tu préstamo con un diferencial de por ejemplo el 1,5%, en un interés total del 3%, 4% o 5%. Depende de los años que el Euríbor esté alto, pero cuando eso ocurra tener un interés fijo del 2,5% – 3% puede ser una bendición y un seguro para muchos. Algo así como una cláusula techo que te impide pagar más que los demás aunque el Euríbor se dispare.

Las hipotecas a tipo fijo que se veían antes, con intereses por encima del 4%, incluso cercanos al 6% y 7% no eran nada convenientes sino mucho más caras las de tipo variable. Es cierto que te daban la tranquilidad de saber qué pagabas mes a mes, sin revisiones que te dieran sustos ni sobresaltos, pero tampoco alegrías.

Por eso se han ofertado poco y sólo el 6% de los préstamos actuales en España tienen interés fijo , frente al 90% que van a interés variable ligado al Euríbor. El resto son de Míbor e IRPH actual y sus variantes desaparecidas.

La guerra de las hipotecas por captar nuevos clientes también ha llegado a los préstamos con interés fijo. Se caracterizan porque exigen mucha vinculación y comisiones en la mayoría de los casos, plazos más cortos para devolver el dinero (tirando más a 20 años que a 30) y el 80% del valor de tasación del piso.

Aquí va el ranking de las mejores hipotecas a tipo fijo que los bancos ofrecen actualmente:

 

Hipoteca Interés Capital Máximo Plazo Comisiones / vinculación
Hipoteca HI-FI 10. Caixa Guissona 2,50% 100% 10 años NO / 1 producto
Hipoteca 20. Hipotecas.com (UCI) 2,80% 80% 20 años NO / 1 producto
Kutxabank 2,50% 80% 30 años SI / 5 productos
Cajasur 2,50% 80% 30 años SI / 6 productos
Bankoa 2,50% 65% 20 años SI / 3 productos
Hipoteca 25. Hipotecas.com (UCI) 2,85% 80% 25 años NO / 1 producto
Ibercaja 2,80% 80% 20 años SI / 5 productos
Hipoteca HI-FI 20. Caixa Guissona 3,00% 100% 20 años NO / 1 producto
Hipoteca Fija Premium. Banco Sabadell 2,90% 80% 20 años SI / 3 productos
Activo Bank 3,25% 80% 30 años SI / 3 productos