En la eliminación total de la cláusula suelo y sus efectos vamos poco a poco. El suelo supone pagar un interés mínimo fijo del 2%, 3%, 4% (depende del contrato y del banco) que impide que el cliente pueda abaratar la cuota cuando el Euríbor (ahora en el 0,255%) más el diferencial bajan de esa cantidad.
El nuevo paso lo ha vuelto a dar el Tribunal Supremo, que por tercera vez ha dicho que la cláusula suelo es nula si durante su contratación hubo falta de transparencia. La novedad es que el pasado 22 de febrero ha reconocido que los bancos que apliquen cláusulas suelo tendrán que devolver el dinero cobrado de más a sus clientes, con dos condiciones.
La primera es que se pueda demostrar que la cláusula te la endosaron sin transparencia y la segunda es que sólo se devuelven las cantidades cobradas de más desde el 9 de mayo de 2013, fecha en que el Tribunal Supremo dictó su primera sentencia gorda contra el suelo.
En ella obligaba a BBVA, Novagalicia Caixa y Cajamar a eliminar el suelo de todas sus hipotecas, algo que hicieron a regañadientes, quejándose por los millones de euros que iban a perder. Desde entonces sólo Banesto lo ha retirado voluntariamente, el resto de entidades que lo han quitado ha sido a golpe de sentencia.
Es muy fuerte que desde mayo de 2013 la cláusula suelo ha seguido usándose y comercializando en nuevas hipotecas. Si crees que en tu caso hubo falta de transparencia, pídele al banco por escrito que te la quite, amparándote en estas sentencias del Supremo y recordando que también debe devolverte lo cobrado de más desde el 9 de mayo de 2013.
Si el banco se niega puedes recurrir a un abogado, pero echa números para saber si te compensa porque deberás pagar unos 400-500 € de tasas judiciales, otros 400 € de procurador, más lo que te cobre el abogado. Quizá si demandas sí que puedas conseguir que le banco te devuelva todo el dinero pagado de más por el suelo y no sólo desde la fecha mencionada.
Cuánto dinero puedes recuperar dependerá del año en que firmaste la hipoteca, cuál es tu diferencial, cuál es el suelo y a cuánto cotizara el Euríbor en cada momento. Que el Supremo sea tan insistente con la falta de transparencia indica que no se debe consentir esto en ninguna otra cláusula del contrato hipotecario, lo que puede dar pie a reclamar otros abusos del banco.
Demostrar la falta de transparencia es difícil pero no imposible. Puedes alegar las siguientes cosas: que no te avisaron que era inadecuado para tu perfil, si no hubo simulación de las cuotas a pagar, si no te dieron oferta vinculante, si el suelo no aparece en el folleto publicitario o está enmascarado, si hablásteis del diferencial y de cómo bajarlo con vinculación pero no se dijo ni pío de que no te valdría de nada porque había un suelo que limitaba el mínimo a pagar…Hay muchos supuestos a los que te puedes agarrar, que unidos a la opacidad de muchos bancos pueden ser tu mejor aliado para reclamar.