Cuando firmes una hipoteca, no pienses sólo qué cuota puedes pagar hoy, fíjate también si la podrás pagar mañana. La hipoteca es algo que se firma por años, muchas veces décadas enteras. De media, se tardan 18 años en pagar una hipoteca.
Si es a tipo fijo siempre conocerás el recibo, porque el tipo de interés no variará, lo que supone que a veces pagarás más que el resto -como ahora al principio, porque los tipos están bajos- y que otras veces pagarás menos, cuandos los tipos suban.
Y es que subirán. Aunque el Euríbor ha cerrado marzo en el mínimo histórico del -0,110%, los analistas anuncian que ha tocado fondo y que dentro de poco empezará a aumentar lenta y gradualmente. Quizá en los próximos meses o en 2018, ya que el Banco Central Europeo no mantendrá mucho más tiempo los tipos de interés en el 0% actual.
Cuando lo haga, las cuotas puede que se mantengan casi igual que en la última revisión, pero si la tendencia del Euríbor continúa y sube mes tras mes, por poco que sea, terminará aumentando las cuotas en las siguientes revisiones.
En cuanto pases de pagar Euríbor + 0% a Euríbor + 1%, los intereses de la hipoteca costarán el doble y tienes que prepararte. Antes de firmar un préstamo a interés variable calcula cómo sería tu cuota con Euríbor + 5,393%, la cifra más alta alcanzada por este índice en julio de 2008. Suena lejos, pero podría volver a pasar en anos… Así que más vale hacer una simulación de cuotas en condiciones, que lamentarse cuando no puedas hacer frente.
¿Podrías pagar la hipoteca si sube hasta ese precio? ¿Y podrías pagarla si tus ingresos bajan? Es otra posibilidad: que desgraciadamente te quedes un tiempo en el paro y no tengas un seguro que te pague la hipoteca, o pierdas el empleo, o cambies a otro por menor sueldo. Nadie quiere algo así y seguro que lucharás para que no suceda, pero es algo que podría ocurrir y más vale prevenir que dar las llaves del piso al banco.
La cuota no debe suponer más de un tercio de los ingresos que entren en casa, incluidas otras deudas como el coche, un préstamo para estudios o lo que sea. Si superas ese tercio, te arriesgas a no llegar a fin de mes ni afrontar los gastos que te vengan. Ya sabemos que la hipoteca es lo último que dejamos de pagar, justo por detrás de la comida, pero se han visto casos en los que el banco ha subastado la casa porque al no afrontar la deuda ha decidido ejecutar el préstamo.
Con la nueva ley, el banco esperará más tiempo, ya no lo hará al tercer mes, y dependerá también de que las cuotas no pagadas sean al menos el 3% de lo que te prestaron. Pero, como digo, más vale prevenir. Suenan tambores de subida del Euríbor, hay que estar preparados para decir adiós a las cuotas baratas y hola a mensualidades más altas.